El doctor en biología Sergio de Cima Martín ha trabajado los tres últimos años en el Centro de Investigaciones contra el Cáncer de Salamanca, en un proyecto que ha permitido conocer el papel de una proteína en la aparición del cáncer, pero la investigación ha quedado estancada porque el grifo de la financiación por parte de la Junta de Castilla y León se ha cerrado. Este especialista se está planteando seriamente dar un cambio radical a su vida y cambiar los laboratorios por el campo y convertirse en agricultor.

Agricultor en una pedanía de 140 habitantes

Según explica el doctor en biología, en una entrevista en El Norte de Castilla, "veía complicado continuar investigando y mi padre se había jubilado como agricultor. Así que he decidido seguir con sus tierras para ganarme la vida", explica De Cima, que se plantea dedicarse a la agricultura en Villarrobejo, una pedanía de Santervás de la Vega que cuenta sólo con 140 habitantes.

La investigación del doctor De Cima Martín descubrió el papel que juegan los cambios en la proteína C3G en la aparición del cáncer. "Se dan cuando algo no funciona bien en la regulación interna de la célula, que empieza a multiplicarse sin control y aparecen los tumores", puntualiza el biólogo, que pudo dar con la manera de detectar tumores en las etapas más tempranas de la enfermedad. "Era imposible que pudiera continuar porque no hay nada de dinero", dice sobre la paralización del proyecto, en junio pasado, cuando pasó a integrar la lista de desempleados.

El 80% de investigadores no encuentran un empleo

"La ciencia es como una pirámide. Acabas tu carrera y luego te dan becas para hacer tesis. De ahí, pueden salir 1.000 doctores, pero luego no hay sitio para seguir investigando porque las plazas postdoctorales que salen pueden suponer un 20% de las doctorales. Entonces, el 80% que sobra se tiene que buscar la vida", afirma el biólogo, al narrar la situación que viven cientos de investigadores.

De Cima parece resignado a su nuevo destino como agricultor: "Me gusta el campo y es una buena alternativa. Hace tiempo que esto no tenía salida porque veía que no había plazas para investigadores senior". Se ahorra en investigación, pero se "multiplican los gastos médicos", advierte el biólogo, que se ha tenido que enfrentar a un tratamiento de quimioterapia para curar un cáncer que, afortunadamente, le detectaron a tiempo.