Las bayetas y los estropajos son dos utensilios que se utilizan en la totalidad de los hogares españoles. Por su habitual uso también son susceptibles de ser un foco de bacterias y gérmenes si no desinfectan correctamente. Por eso, la OCU ha advertido del uso de sendos objetos y su posterior higiene.
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha elaborado un estudio sobre el estado de la higiene de estropajos y bacterias en los hogares españoles. Algunos socios de la organización han colaborado en esta iniciativa enviando sus propios utensilios para ser analizados en el laboratorio de cara a una mejor higiene en el futuro.
Los resultados arrojan que hasta un 96% de los estropajos y un 91% de las bayetas se encuentran en unas condiciones higiénicas paupérrimas. Pero, además, el análisis ha ido acompañado de una encuesta sobre el uso de estos. Los usuarios han explicadlo que no desinfectan ni las bayetas ni los estropajos en el 79%, mientras que lo hacen llevan a cabo diversos métodos.
Un 21% de los estropajos desinfectados lo hacen en el microondas, mientras que el porcentaje sube en las bayetas hasta el 37%, aunque, en este caso, los usuarios se decantan por la lavadora. La OCU ha determinado, gracias a estos análisis, que ninguno de estos dos métodos es el más idóneo.
La OCU simuló un uso normal para medir la cantidad de gérmenes que contenían estropajos y bayetas para que, posteriormente, se sometieran a diversos métodos de desinfección. Microondas y lavadora redujeron la contaminación, pero no al completo. De hecho, en el lavavajillas, las bacterias no sólo no desaparecieron, sino que se multiplicaron.
Trucos para su higiene completa
Por lo tanto, la organización recuerda que los métodos más sencillos también son los más eficaces, por lo que conviene aclararlos con agua, escurrirlos bien y secarlos o ponerlos en remojo en agua y lejía diluida al 10% durante cinco minutos. Estos métodos, según los resultados, borraron del mapa a todos los gérmenes.
Además, la OCU recomiendo otros métodos para prevenir y eliminar los gérmenes en bayetas y estropajos. Se sugiere eliminar los restos de comida tras cada uso, aclarar con agua y escurrir los utensilios tras usarlos, amén de dejar extendida la bayeta después de su utilización, para después ponerlos a remojar en agua con lejía. Por último, se recomienda, también, la sustitución periódica de estos objetos sin que estén excesivamente deteriorados.