Felipe VI ha vivido este jueves un pequeño aprieto durante la cena ofrecida en honor a las autoridades de Andorra, que recordó uan escena similar vivida por su padre, Juan Carlos I, durante un brindis.

La pasada noche, Felipe VI protagonizó la primera visita oficial de un rey español a Andorra y quiso brindar por el país vecino. "Y con estas palabras levanto mi copa...", empezó diciendo el monarca que miró a un lado y a otro buscando la deseada copa, que no estaba. Uno de esos momentos trágame tierra del que el Rey salió con una sonrisa mientras miraba al personal del acto, que finalmenrte ha acudido en su ayuda.

El Rey había hecho antes del brindis una intervención durante la cena ofrecida por los copríncipes de Andorra, el arzobispo de La Seu d’Urgell (Lleida), Joan Enric Vives, y Patrick Strzoda, el representante del presidente francés, Emmanuel Macron. Se refirió a que la invitación a visitar Andorra fue cursada en 2016, y que han podido realizarla ahora, "por fin, después de un período muy complicado". Y agradeció al Principado que hubiera acogido a los españoles exiliados durante la Guerra Civil.

Juan Carlos I: "Que no nos han puesto nada"

Lo sucedido a Felipe VI ha recordado una escena similar vivida por su padre, Juan Carlos I, quien vivió el mismo percance durante un brindis, del que salió con su acostumbrado sentido del humor: “Os invito a levantar nuestras copas... que no nos han puesto nada”, afirmó al ver que no había nada con lo que brindar, según recuerda el Huffington Post.

Cuando alguien se le acercó rápídamente con una copa, el Rey continuó con sus bromas: “Sí, ésta es la mía. ¿Y las otras?”.