España empieza a asomar la cabeza por el orificio de salida de este túnel de calor intenso que ha supuesto la primera semana completa del mes de agosto. La vaguada térmica de finales de julio preparó el terreno para un incremento excesivo de las temperaturas a lo largo y ancho de todo el país. Patricia, una borrasca de aire atlántico que generó un pasillo para que se adentrara una masa fría en paralelo al anticiclón de las Azores, abandonó el país y el dominio del territorio nacional lo tomó un frente de aire caliente proveniente del norte de África, que ha ido acompañado de calima y ha desbordado el mercurio de los termómetros, además de replicarse en las temperaturas nocturnas, con valores próximos a los 30 grados que han dificultado el descanso a la población. Sin embargo, en las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) se halla un descenso ligero del asfixiante bochorno, a pesar de que aún se registrarán marcas de récord y superiores a 44 grados en una parte del país.

La ola de calor que asfixia a todo el país empezará a desaparecer este viernes de la Península, a pesar de que los valores térmicos que se prevén para esta jornada se mantendrán en cotas muy altas. De hecho, se mantiene el aviso rojo en puntos donde se espera que el mercurio supere los 44 grados centígrados, aunque su predominio es prácticamente ínfimo en comparación con el resto de la semana. Sí que se mantendrán las alertas amarilla y naranja, que afectarán en torno a 25 provincias, así como a las dos ciudades autónomas, según ha publicado la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), que ha alimentado el optimismo de una totalidad de los españoles, pues prevé que la masa de aire caliente africano se desplace de la Península hacia las islas Canarias, donde vivirán los efectos de la tercera ola de calor de este verano 2023.

Así las cosas, el riesgo extremo por altas temperaturas se mantendrá, principalmente, en el sur de la Península, con especial atención a las provincias de Córdoba y Sevilla (44 grados), mientras que en Huelva, Málaga, Granada, Jaén y Cádiz el aviso baja al nivel naranja, con valores que rondarán los 40 y 43 grados centígrados. Tan solo la provincia de Almería se librará de los avisos extremos por calor este viernes, aunque la máxima se mantiene en 35º. El mismo color teñirá la autonomía extremeña, con los termómetros llegando incluso a los 40 puntos, lo mismo que en Ciudad Real, Cuenta, Toledo y Madrid. Las dos ciudades autónomas, Ceuta y Melilla, además de diversos puntos de Cataluña, País Vascos, La Rioja, Aragón y Castilla y León se espera que el mercurio ascienda a los 39 grados.

Los problemas comenzarán en las islas Canarias. La AEMET avisa por riesgo extremo por temperaturas de hasta 40º en Gran Canaria y emite un aviso naranja por valores de hasta 38 grados en el resto de la comunidad insular. No obstante, esta alerta por exceso de calor viene acompañada por un aviso de polvo en suspensión que derivará en calima y en vientos de hasta 70 kilómetros por hora excepto en Lanzarote y Fuerteventura. Además, este escenario dejará un oleaje fuerte en buena parte de las islas.

Descensos generalizados

En cuanto a los cielos, la AEMET prevé una jornada marcada por la escasa aparición de las nubes, aunque avisa de un frente atlántico que estará poco activo y que incidirá sobre el extremo noroeste del país, desatando cielos algo nubosos y que se extenderán de oeste a este, con previsión de dejar precipitaciones en el norte de Galicia y en el oeste asturiano, sin descartar las áreas colindantes.

Asimismo, se esperan nubes de evolución en Pirineos, con posibilidad de algún chubasco o tormenta potencialmente aislados. En el norte de Castilla y León y en el este de la cordillera Ibérica también se prevén precipitaciones, aunque no se descarta tormentas secas. Sin embargo, en Canarias se alternarán intervalos de nubes medias y altas que acompañarán a la calima y que podría tener sus réplicas en la calidad del aire del sur de España, el Estrecho de Gibraltar y el Mar de Alborán. Por la mañana, hay avisos de nieblas en las costas del atlántico gallegas que a lo largo de la jornada podrían evolucionar a brumas que incidirán sobre Galicia y Asturias.

Las máximas tenderán al descenso en el tercio este peninsular y en Baleares y ese descenso será más efectivo en Levante. En cambio, Canarias saldrá peor parada de una jornada de viernes en la que se espera una relajación de los termómetros y en la mitad noroeste peninsular. En cambio, las mínimas bajarán en términos generales, a excepción del noroeste y en el Estrecho, mientras que en los dos archipiélagos y en las dos ciudades autónomas.