A ver, el otro día estaba tomando algo con mis padres y salió el tema de la ocupación porque estábamos hablando de que es muy difícil alquilar un piso y que hay pisos vacíos por ahí que no se usan y bla bla bla. Lo típico de que sales de casa en verano y que te ocupan el piso sin que te des cuenta y, ale, a tomar por culo todo por lo que has trabajado. O que si se lo alquilas a alguno y te dejan de pagar, pues tienes un problemón. Y todo esto se metía dentro del mismo saco. El saco de la ocupación. El saco de la usurpación. Yo, desde mi más absoluta ignorancia, pero con toda la lógica del mundo que creo que tengo, dije que eso no era así. Que el problema de la ocupación no es uno de los problemas que afecten directamente a la vivienda. Aunque la lógica de cada uno es la suya, pero claro, luego te enciendes la televisión y uno de cada cinco anuncios va sobre alarmas que protegen tu piso para que cuando te vayas en agosto de vacaciones nadie se meta dentro. Fijaos.
Lo que quiero decir es que este tema es una movida que nos han metido por el culo los medios y los políticos y que ha calado el miedo en nuestros huesos. ¿No? Vamos, yo conozco ocupas, tengo amigos que ocupan, y esos amigos que ocupan JAMÁS han ocupado una casa que esté habitada por personas de manera habitual, o incluso estacional. Esta gente se preocupa en saber qué pisos pertenecen a fondos buitre y que están en completo desuso, los vigilan con distancia para confirmar que de verdad es así, y una vez todo esto está confirmado y saben que no le van a joder la vida a nadie y que si le joden a alguien ese alguien es un banco, pues se atreven a meterse dentro y, entonces si, ocupar ese piso. Y no sé a ti que estás leyendo este artículo, pero a mí que lo estoy escribiendo, me parece un acto de valentía y rebeldía con el que no me atrevería. Vamos, que si pudiera ocuparía, pero me faltan huevos. No tengo papo a meterme en ese berenjenal y me resuenan campanas que me hacen pensar que mucho tiene que ver con cómo me puedan ver los demás.
¿Es un problema real en España el tema de la ocupación? Para empezar, miraos el video por que hay un chico que lo explica que da gusto. No es lo mismo un allanamiento de morada que la usurpación de un piso. Os buscáis las diferencias si os interesa, que no quiero aburriros aquí, por si estas navidades le queréis dar en la boca un ZAS a vuestro cuñado cuando veáis que por no hablar de fútbol habla de ocupas y dictaduras.
Me he metido en el INE (Instituto Nacional de Estadística) para buscar datos para poder ponerlos aquí, pero esa página no es nada intuitiva y me he vuelto loco encontrando nada. Así que he bicheado un poco en internet: en España se registran unas 15.000 denuncias anuales por ocupación ilegal, unos años más y otros menos; por otro lado, en España hay más de 25 millones de viviendas. Así que si sumamos 2+2… No, el problema de la ocupación no es problema tal como para llevarlo por bandera ningún partido político; dejad a la justicia que se encargue de ello. ¡NO A LOS DESOKUPAS! Son lo más parecido que tenemos aquí al ICE. Meteros en su página web, dan miedo. Señores tatuados hasta arriba, sin cuello de tanto ejercitar el músculo, y que llevan la violencia por bandera.
Para no liarme y volver a los raíles de este artículo. Me ha gustado salir a la calle y ver que la gente prefiere no opinar si no sabe del tema, lo más inteligente que podemos hacer, o que si se mojan, siempre hay un punto a favor de entender el tema antes que juzgarlo, que pueda existir una conversación. ¿Para concluir? Pues creo que esto no tiene conclusión alguna. Simplemente, os invito a que no entréis en el bulo de que la ocupación ilegal es un problema en auge. Tampoco os invito a que le metáis una patada a una puerta y os metáis en una casa sin pensar. Pero sí os invito a que reflexionéis y os pongáis en la situación siguiente antes de hablar de la ocupación para bien o para mal. ¿Qué haríais si os encontráis siendo una cabeza de familia con un primogénito y una bebé de pocos meses, una persona mayor en silla de ruedas a vuestro cargo, un adorable perrito que le gusta comerse las cacas de otros perritos, todos juntos en la calle porque no podéis pagar vuestra casa y no tenéis a nadie que os pueda acoger? Pero sí que sabéis que en vuestro edificio hay un piso vacío de toda la vida de Dios, que es de un banco, y lo sabes por qué habéis vivido en ese edificio durante años y lo habéis hablado con los que eran vuestros vecinos. ¿Qué haríais? ¡A ver, he ido a buscar la imagen más desoladora! Me ha faltado acudir a la cerillera vendiendo cerillas con guantes rotos en una esquina en la noche más gélida del más frío invierno, sí, pero es a lo que estamos jugando.
Aunque alguno dirá, pues si los ocupas son unos perroflautas. Pues mira, cariño, el perroflauta no está pagando alquiler y puede vivir más desahogado que tú, porque tiene más c*ñ* todas juntas y entiende que si el sistema no me ayuda, pues tengo que ir en contra del sistema. Existe una alarma social con ciertos temas debido a los discursos políticos y los medios de comunicación, y no nos merecemos vivir con esa alarma porque unos pocos quieran inflarse los bolsillos. De toda aparente desgracia, alguien se acaba lucrando.
Lo que digo en todos los artículos, al parecer, si no nos revelamos, nos comen, amigas. Menos agachar la cabeza y más alzar las antorchas.