La Casa Real informó este domingo de que Felipe VI ha renunciado a la herencia del rey emérito Juan Carlos I "que personalmente le pudiera corresponder" y ha avanzado también que éste dejará de percibir la asignación que tiene fijada en los Presupuestos de la Casa de S.M. el Rey.

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Esta maniobra, que ha pasado casi de soslayo dado el actual estado de alarma con motivo del coronavirus, ha provocado todo tipo de reacciones, tanto política como de analistas.

Es el caso de José Antonio Zarzalejos, quien a través de una columna en El Periódico, ha apuntado a que el daño que ha provocado Juan Carlos I a la Corona es muy profundo e, incluso, ha apuntado al “autoexilio”.

A su juicio, “las medidas que ha tomado” Felipe VI “son estimables, pero no son suficientes para anclar la Corona en el imaginario colectivo español”.

El periodista considera que “debe dar un paso más y retirar la sombra de su padre por completo -estaría indicado el autoexilio- y, si el caso fuere, facilitar que se depuren responsabilidades penales ante la Sala Segunda del Supremo”.

Zarzalejos ha afirmado que Juan Carlos “está destrozando con una frivolidad extraordinaria” el legado de su hijo y el suyo propio. En otras palabras, se está cargando la imagen de una institución “indefensa que depende de la ayuda y soporte social, institucional y político”.

 Por último, apunta a que el comunicado sería “un cortafuegos” para proteger la Corona y “achicar la larga sombra de las conductas del emérito que se enlazaban con las de su yerno y con la tozudez de la infanta Cristina que sigue sin renunciar, por simbólico que sea, a los derechos sucesorios”.