Su discurso, pausado y sentido, ha sido aplaudido en varias ocasiones, aunque la ovación más unánime ha llegado cuando  ha recordado los avances sociales de sus legislaturas, en especial el matrimonio homosexual, y cuando ha reprochado al nuevo gobierno la eliminación de la asignatura Educación para la Ciudadanía por un ministro que "ni siquiera se ha aproximado al texto".

Al servicio del partido
El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, se ha puesto hoy al servicio de su partido para lo que le necesiten y ha emplazado a sus compañeros a cerrar filas con la persona que mañana le sustituya en el liderazgo y a que, "pase lo que pase, no se pierdan los afectos y las lealtades. Zapatero, que al finalizar su discurso ha recibido una larga y calurosa ovación, se ha despedido así de sus responsabilidades al frente del PSOE después de once años y medio, antes de que se discuta su informe de gestión en el 38 congreso federal que tiene que elegir mañana a su sustituto entre Alfredo Pérez Rubalcaba y Carme Chacón.

El ejemplo de Bono
Zapatero se ha "atrevido" a pedir una última cosa a sus compañeros y es que "todos democráticamente estén detrás de quien tenga el liderazgo", porque un partido con 130 años de historia lo merece y España "lo necesita". En un discurso de más de una hora de duración, el ex presidente del Gobierno ha querido citar sólo a uno de sus compañeros, a José Bono, con quien disputó el liderazgo del PSOE en el año 2000 y con quien, a raíz de esa contienda, fraguó "una lealtad, un afecto y una amistad" que todavía hoy perdura. "Sé que sois capaces de hacerlo, y de hacerlo como se hacen las cosas en esta casa. Como mañana vamos a hacer las cosas, libremente, democráticamente", ha apostillado.

Sin muertes de ETA
Zapatero ha asegurado en su último discurso que quizás "haya que decirlo en voz baja, pero es muy probable que nunca más haya una muerte a manos de ETA", por lo que ha estimado que "debemos estar satisfechos". El todavía líder del PSOE ha planteado ante el plenario del 38 Congreso federal del PSOE que el cónclave se celebra en un momento "significativo" por la situación en la que se encuentra la banda terrorista y ha recordado que en el anterior congreso "recordábamos a la última víctima", al concejal de Mondragón, Isaías Carrasco.

Los que querían la paz
Ha sostenido que durante sus ocho años al frente del Gobierno ha apoyado de "manera permanente" a los que "de una u otra manera" querían la paz y el final de la banda terrorista ETA y ha expresado un especial reconocimiento a los socialistas de Euskadi. "Los más intenso, pero también lo más gratificante es ver a los compañeros del País Vasco. Han aguantado, no ha descansado hasta alcanzar el fin de la violencia y ETA", ha enfatizado Zapatero.

El fin de Educación para la Ciudadanía
Zapatero también ha lamentado hoy la supresión de la asignatura Educación por la Ciudadanía anunciada por el Gobierno de Mariano Rajoy y que la decisión la haya adoptado quien "ni siquiera se ha aproximado al texto". Ha recordado la ampliación de derechos que su Gobierno, especialmente en la primera de sus legislaturas, llevó a cabo como seña de identidad básica de su gestión y ha realizado una mención expresa a la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo.

Una sociedad fuerte
"No perdimos el tiempo", ha enfatizado Zapatero antes de insistir en que la Educación para la Ciudadanía es para él un derecho, porque "no hay sociedad más fuerte que aquella donde los jóvenes y los adolescentes conozcan sus derechos y sepan qué es la democracia, el respeto y el pluralismo".