Con las elecciones de Francia a punto de claudicar, la expectación en Europa se agrava a medida que se acerca el día de la votación. Los ciudadanos tendrán que decidirse este fin de semana por Emmanuel Macron o Marine Le Pen para que se convierta en el principal líder del país. En este sentido, Yolanda Díaz ha lanzado una contundente reflexión sobre dicho escenario político.

La vicepresidenta segunda del Gobierno de España y ministra de Trabajo se ha mostrado clara con sus percepciones políticas en una intervención con la prensa que ha protagonizado este jueves en la Universidad de Santiago de Compostela, decantándose así por Macron, a quien votaría sin duda alguna “si fuese francesa”.

“Si tuviera que votar el domingo sabría muy bien lo que iba a votar. El futuro no pasa entre tener que elegir entre lo malo y lo peor. El futuro es vuestro y no va de elegir a Macron o a Le Pen. Eso es decirle a la ciudadanía que tiene que resignarse. No tenemos mucho más”, esgrimía Díaz dirigiéndose a los jóvenes. 

La ministra sentenciaba así que el futuro no puede fraguarse con “políticas de extrema derecha”: “El futuro tiene que pasar por los servicios públicos, por las escuelas infantiles, por la gente joven, por el derecho a trabajar y tener vidas dignas y no vivir para trabajar con vidas indignas”, enumeraba.

Regresando a las elecciones francesas y con una mirada más amplia al espectro político europeo, Díaz remarcaba que los países se juegan, “nada más y nada menos, que la democracia”. “Esta es la eterna batalla. Este es el debate de Macron. No hay que elegir entre lo malo y lo peor, hay que lanzar la mirada hacia el horizonte”, proponía la titular de Trabajo en su reflexivo discurso.

Cordón sanitario en Francia contra Le Pen

Este 24 de abril el pueblo francés resolverá en la segunda vuelta de los comicios quién será el candidato a la presidencia que se alzará con la victoria: Macron o Le Pen. El primero fue el más votado en la primera votación con un 28,6%, mientras que la líder ultraderechista quedó en segundo lugar con el 24,4%. Para evitar el ascenso de la extrema derecha, los candidatos conservadores, socialistas y ecologistas formalizaron un cordón sanitario para catapultar a Macron a la reelección.