La vicepresidenta del Gobierno y líder de Sumar, Yolanda Díaz, ha dejado en manos de Pedro Sánchez la continuidad de Irene Montero al frente del Ministerio de Igualdad.

Sumar lleva evitando semanas la pregunta y se limita a contestar que primero se encuentran negociando un programa con el que presentarse y tratan de responder a una pregunta incómoda que Podemos ha convertido en propuesta para un sí en la futura investidura. Sin embargo, Yolanda Díaz ha dejado en manos de Pedro Sánchez la decisión, e incluso ha asegurado que, dado que todo depende del líder del PSOE, ella puede no ser ministra.

"Yo creo que mi manera de hacer política ya la conocen los españoles", indicaba en una entrevista en El matí de Catalunya Ràdio si Irene Montero debe continuar como titular de Igualdad. "Nosotros estamos negociando con el Partido Socialista. No estamos negociando un Ejecutivo, es decir, carteras. Estamos negociando un programa de Gobierno para nuestro país. Lo estamos haciendo de manera paralela a la que estamos negociando con otras formaciones políticas", explicaba Díaz.

"Le agradezco esta pregunta. Le quiero dar las gracias al equipo negociador de Sumar liderado por el señor Nacho Álvarez y al equipo negociador del Partido Socialista liderado por la señora María Jesús Montero. Llevamos desde casi la semana siguente de las elecciones para tener un país mejor y seguir ganando derechos. Nosotros vamos a formar parte de un Gobierno para que los trabajadores y trabajadoras sigan recuperando derechos, para hablar del despido, para hablar de los cuidados", proseguía diciendo repitiendo el argumentario que Sumar lleva repitiendo varias semanas

"¿Cón o sin Montero?", preguntaba de nuevo Ricard Ustrell a la ministra. "No estamos hablando de personas. ¿Usted se imagina? ¿Yo voy a ser ministra?", indicaba ella. "¿Pero usted cree que yo voy a ser ministra? ¿Lo sabe usted?", insistía pregunando Yolanda Díaz asegurando que no sabe si continuará como ministra y que quien lo sabe es Pedro Sánchez.

"Hay que respetar a los presidentes del Gobierno. Y quiero hacer pedagogía con esto porque le compete al presidente del Gobierno, aunque sea una coalición progresista, hacer un diseño compartido, después de tener un programa, que no lo tenemos. Aún estamos negociando con el Partido Socialista y aún estamos lejos de tener un acuerdo. La ciudadanía ya ha visto para qué servimos. Servimos para poner en marcha políticas públicas que mejoran la vida de la gente. Vamos a estar en un Gobierno si es para hablar de los problemas de la gente como el aceite o el precio de los carburantes", proseguía diciendo dejando en el presidente del Gobierno en funciones la responsabilidad de elegir los nombres.

De hecho, acababa reconociendo que, aunque una vez tengan el programa se sentarán juntos a confeccionar el Consejo de Ministros, será Sánchez el que tenga la decisión de elegir finalmente los nombres: "El señor Sánchez me conoce bien que yo no negocio la casa por el tejado. Me una falta de respeto a la ciudadanía. Voy a compartir con el señor Sánchez a posteriori cuál es el Ejecutivo. La ciudadanía se merece respeto y lo que quiere saber es para qué vamos a estar en el Gobierno. Para quién viene después y lo trabajaré con el señor Sánchez. También le digo que respetando la voluntad compartida de una coalición que está liderada por el señor Sánchez".

Unidas Podemos elegía a sus ministros

Unas declaraciones que evidencian el cambio de tornas a la hora de repartir las fuerzas de la coalición. En esta pasada legislatura era el PSOE el que elegía a los gobiernos del PSOE y Unidas Podemos el que elegía a los ministros de Unidas Podemos.

De hecho, ni siquiera durante la crisis de Gobierno que Sánchez aplicó Sánchez en 2021 para reformar el Ejecutivo dejando caer a pesos pesados como José Luis Ábalos o Carmen Calvo se saldaron con la salida de ministros de Podemos que solo han variado tras la marcha de Pablo Iglesias dando el testigo a Ione Belarra y la de Manuel Castells por motivos de salud. De hecho, fue unidas Podemos el que definió que la vicepresidencia de Iglesias pasaba a manos de Díaz y que el Ministerio de Derechos Sociales se quedaba sin la vicepresidencia.

No obstante, y aunque Sumar no hable de ministros, la continuidad de Díaz, a pesar de que ella no lo asegure, se da por descontada. Incluso un día después de las elecciones el partido ya dejaba entrever algún perfil que incorporar al Ejecutivo como es el caso de Agustín Santos Maraver, fichaje estrella de Sumar y ex embajador de España ante la ONU. Un perfil que gusta en el PSOE dado su carácter moderado y que bien podría ocuparse de un ministerio de peso tras una investidura de Sánchez.