Centenares de vecinos han rodeado la Plaza Roja de Vallecas frente a un cordón policial que impedía llegar hasta el lugar central de la misma donde se ubicaban los miembros y simpatizantes de Vox, a los que han recibido con gritos de 'Madrid será la tumba del fascismo' o 'Fuera fascistas de nuestros barrios'.

Por su parte, los simpatizantes de Vox han portado banderas y simbología con la enseña nacional y carteles en los que se podía leer 'barrios seguros'.

Ambos grupos han estado separados en todo momento por un cordón de seguridad de agentes de la Policía Nacional para evitar el enfrenamiento. Al lugar se ha desplazado un importante número de efectivos de los antidisturbios y se ha desplegado un fuerte dispositivo en la zona, que en los momentos previos ha llevado a cabo controles de identificación.

En un momento, tras dirigir unas palabras a los asistentes, Abascal se ha acercado a los manifestantes. En sus 18 pasos hasta el cordón policial, el líder ultraderechista ha recibido una lluvia de botellazos.