El presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha asegurado este jueves que su objetivo es convertir a Cataluña en un país independiente, que si no lo consigue dejará la Presidencia y que descarta presentarse a futuras elecciones: "Si yo llegara a la conclusión de que no puedo llevar a este país a la independencia, yo me marcharía".

En una entrevista de Rac1 ha defendido que el proceso independentista se basa en la gente y que su intención es culminarlo, aunque está "obviamente dispuesto" a dejar la Generalitat si se logra investir al expresidente Carles Puigdemont.

Torra ha afirmado que el Govern intenta que el Gobierno central acepte una mesa de negociación para abordar la autodeterminación con la presencia de algún observador internacional, y espera que tras el encuentro de este viernes en Barcelona se sepa "algo más" sobre la iniciativa.

Sin embargo, ha criticado que en sus reuniones entre ejecutivos el equipo de Pedro Sánchez no llega con ninguna propuesta: "Somos los únicos que, cuando vamos a reuniones con el Gobierno español, vamos con papeles y el Gobierno español, con una hoja en blanco".

Ha detallado que los 21 puntos que planteó a Sánchez en su reunión el pasado 20 de diciembre versaban en torno a la regeneración democrática y a la "desfranquización" de España, además de incluir la autodeterminación de Cataluña, pero que no los pudieron abordar a fondo.

"Dialogar no es llegar a una sala, sentarse en un sofá y que te cambien las poinsetias. Es coger papel y bolígrafo y comenzar a trabajar", ha sentenciado el presidente catalán.

Ha asegurado que más de 2,3 millones de catalanes participaron en el referéndum del 1 de octubre de 2017 y ha propuesto negociar con el Gobierno una salida a estos resultados: "Intercambiemos esta situación que tenemos por un referéndum pactado homologado internacionalmente".

También ha defendido que ERC y PDeCAT apoyaran la moción de censura del PSOE contra el anterior presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, "que es el que impone el 155", pero ha criticado que el cambio en La Moncloa no ha supuesto un avance para el soberanismo.

"¿Ha parado la represión? La razia de Girona de la semana pasada, ¿ya ha dimitido la señora Cunillera? ¿Ha dado explicaciones? No", ha reprochado a la delegada del Gobierno en Cataluña tras las detenciones del pasado miércoles en varias localidades de la provincia.