La plataforma de divulgación científica sobre el medio ambiente Hope! ha difundido el potente discurso de Phoebe Plummer, la ecologista que lanzó el pasado viernes sopa de tomate a un cuadro de Vincent van Gogh expuesto en la Galería Nacional de Londres, Los girasoles. Recién salida del juzgado, la activista contra el cambio climático ha hablado ante las cámaras para “dejar algo perfectamente claro”: “No dañamos la pintura de ninguna manera”.

De hecho, Plummer ha afirmado que “en el juzgado dijeron que ha habido daños mínimos en el marco, que es reparable y reemplazable”. “Estaba detrás de un vidrio y nunca, nunca hubiéramos considerado hacerlo si no supiéramos que estaba detrás de un cristal. La mancha salió con un poco de papel de cocina”, ha explicado la joven, quien ha reconocido que “parece una acción un poco ridícula”, pero que no lo hicieron para abrir un debate sobre “si todo el mundo debería lanzar sopa de tomate a cuadros”.

“Lo que estamos planteando es seguir con el tema para poder hacer las preguntas que importan”, ha introducido la ecologista para enumerar varias cuestiones para reflexionar: “¿Está bien que Liz Truss esté dando más de 100 nuevas licencias de combustible fósil? ¿Está bien que los combustibles fósiles estén subvencionados 30 veces más que las renovables cuando la eólica marina es nueve veces más barata actualmente que los combustibles fósiles? ¿Está bien que haya inacción que nos ha llevado a la crisis del incremento del coste de vida? ¿Habrá este invierno gente forzada a escoger entre calentarse y comer?”.

El potente discurso ecologista de Plummer

Con estas preguntas, Plummer alerta de que “esta es la conversación que deberíamos estar teniendo ahora porque no tenemos tiempo que perder”. En el vídeo de la plataforma de divulgación científica sobre el medio ambiente, la activista cita las palabras de Sir David King, quien fue asesor científico del Gobierno británico y Representante Especial para el Cambio Climático: “Lo que hagamos en los próximos 3 o 4 años determinará el futuro de la humanidad”.

“Por esto usamos estas acciones, para llamar la atención de los medios de comunicación”, ha alegado Plummer en su discurso, en el que también ha señalado la urgencia de que los gobiernos y ciudadanos de todo el mundo tomen acciones contra el cambio climático: “Necesitamos que la gente hable de esto ya”. Además, la ecologista también ha justificado la suya: “Sabemos que la resistencia civil funciona. La historia nos lo ha demostrado”.

A raíz de ello, Plummer ha expresado que, “como mujer queer”, sus identidades sexual y de género forman parte de colectivos históricamente oprimidos y que este tipo de acciones han promovido el progreso de la sociedad en ese sentido, por lo que también pueden servir para el activismo medioambiental: “La razón por la que puedo votar, por la que puedo ir a la universidad y por la que espero algún día casarme con la persona que amo es gracias a la gente que participó en resistencias civiles antes de mí”.