Después de un historial lleno de excesos, insultos y revisionismo histórico, Moa fue expulsado de Libertad Digital por diferencias con Vidal, del que criticó sus “esquemas históricos” disparatados o “su admiración un tanto beata y acrítica por el protestantismo”, como explicó ELPLURAL.COM. Entre sus compañeros ultras, Federico Jiménez Losantos se decantó en este duelo por su amigo Vidal.

La pelea sigue desde Intereconomía
Una vez fuera de LD, Moa sigue con la disputa desde otra plataforma mediática ultra de la derecha, Intereconomía, donde ahora aloja su blog. El pseudohistoriador ya colaboraba semanalmente en la revista Época del grupo del exdiputado popular Julio Ariza, y también frecuentaba sus tertulias en Intereconomía TV. En el debut de su blog en Intereconomía Moa de hecho daba las razones de su despido, repitiendo los argumentos que ya tuvo oportunidad de exponer en LD.

“El dogmatismo le lleva a constantes distorsiones”
Después de que Vidal difundiera un artículo apuntando que el menor desarrollo económico de España respecto a otros países europeos se debería a que es un país católico y no protestante, Moa ha tenido la oportunidad este miércoles de cebarse con su excompañero sentenciando desde su blog que “el enfoque dogmático de César Vidal le lleva a constantes distorsiones de la realidad histórica”.

Errores de “enfoque” por su fanatismo
Moa descubre en su hasta ahora compañero de medio que tiene errores de “enfoque”, ya que sus “lucubraciones” parten del principio “de que el protestantismo es el bien casi absoluto, y el catolicismo el mal también casi absoluto”.

“Cumbres de arbitrariedad”
El pseudohistoriador encuentra varios puntos del escrito de Vidal de los que burlarse, como cuando achacó el declive del imperio español a sus luchas contra el protestantismo, cuando en realidad ese fue uno de los muchos frentes a los que se enfrentó, como el Imperio otomano o la Francia católica. Se burla asimismo Moa de que Vidal diga que España “siguió dilapidando sus recursos –suena a historias recientes de fondos comunitarios o de subvenciones– y despertó arruinada porque el oro de las Indias no podía mantener la fiesta de manera perpetua”. Ante tal comparación, Moa sentencia que “Don César escala a menudo cumbres de arbitrariedad”.