La intención del Pedro Sánchez de iniciar una Legislatura en solitario no ha gustado a Unidas Podemos, que ya se plantea boicotear la investidura. Su compromiso de contribuir a un Gobierno progresista pasa por formar parte de él, aunque signifique ir contra los postulados del propio Pablo Iglesias, quien recientemente apuntaba que "la clave" de su relación con Sánchez no era "la confianza", sino "la correlación de fuerzas". Los resultados electorales de la formación morada en las elecciones generales y las territoriales no le deja precisamente en una buena posición de fuerza para negociar.

La "trampa" de Sánchez

Fuentes de Unidas Podemos, según adelanta este jueves El Confidencial, dejan entrever que podrían oponerse a la investidura del líder socialista , al considerar "tramposo" intentar cambiar el resultado de las elecciones generales en tertulias y en portadas. Critican que el presidente socialista les llamara a "reconsiderar" su propuestsa de cogobierno, tras los resultados del domingo y defienden que el de "las elecciones generales siguen siendo los mismos".  

Las elecciones territoriales 'no cuentan'

La cúpula de Unidas Podemos esgrime que las elecciones del domingo pasado no cuentan porque los ciudadanos fueron a las urnas para votar a alcaldes, presidentes autonómicos y eurodiputados, y no la configuración del Gobierno del Estado. Las fuentes citadas recuerdan que Pedro Sánchez cuenta con 123 diputados de los 174 necesarios para la mayoría absoluta, un escaño más de lo establecido dada la retención de sus actas por los cuatro diputados independentistas. 

El fantasma de Ciudadanos

El líder de Podemos insistió hasta el cansancio en el debate electoral de las generales para que Pedro Sánchez aclarara si pactaría con Ciudadanos, una pregunta que el presidente eludió. El malestar de Iglesias ante la posibilidad de un pacto entre el PSOE y Ciudadanos quedó patente anoche, en el programa de entrevistas de Juan Carlos Monedero en Público TV: "Era previsible que después de la campaña el PSOE girase a la derecha y busque un acuerdo con Ciudadanos de manera abierta. No puede sorprenderle a nadie. La política funciona así".

¿Gobierno a la vuelta del verano?

El PSOE espera que Pedro Sánchez pueda presentarse a la investidura a principios de julio, pero todo dependerá de las negociaciones. Si la amenaza solapada de Unidas Podemos se concreta y vota en contra, el presidente socialista tendrá que volver a sentarse a negociar, así que podría no haber gobierno hasta después del verano. Por lo pronto, la postura de Pablo Iglesias parece clara: quieren hacer valer sus 3,7 millones de electores y no habrá apoyo si a cambio no hay cartertas de ministerios.