La dimisión de Carmen Montón está trazando lo que, desde Podemos, es el camino que ha de seguir Pablo Casado. Desde el Partido Popular no dudan en defender a su líder: “El caso Montón y el caso Casado se parecen como un huevo a una castaña”, decía Teodoro García Egea, secretario general.

Pablo Echenique arranca la mañana en Público diciendo que “es triste porque podría haber sido quizás una buena ministra, pero tenía que dimitir como al final ha ocurrido”. A caballo entre ser su opinión personal y la extendida sobre todo el grupo Podemos, cree que el hecho de que “Pedro Sánchez no hubiera salido a apoyar a la ministra desde la presidencia del gobierno de España habría permitido al mismo, además, defender el prestigio de la excelente universidad española frente a esa minoría corrupta que se dedica a regalar títulos a personas influyentes”.

Por supuesto, no pasa por alto que Casado ha sido el único que ha salido en defensa de la ministra. Pero todo esto recae con peso sobre él. Y desde Podemos no lo dudan: primero fue Cifuentes, ahora ha sido Montón. El siguiente en dimitir es Pablo Casado.

Lo dice Echenique, y lo dice Errejón. Así lo compartió en Twitter este martes. “Ayer Casado estaba feliz, ‘todos somos iguales’, pensó. Hoy sabe que le va a tocar dar más explicaciones o asumir las consecuencias”.

Pablo Iglesias tiene claro que “la pelota está en el tejado de Casado. Enseñar la tesis de fin de máster es decir ‘viva el rey’”. Exige que el líder del Partido Popular debe enseñar todos los trabajos de su máster para certificar si hubo plagio o no. Iglesias ha confirmado que se puso en contacto con Pedro Sánchez para comunicarle que le “causa pesar porque era una de las ministras que había mostrado más compromiso con lo público y la sanidad pública”. Pero, desde Podemos, tenían que exigir esa dimisión porque “no es admisible para la dignidad de la universidad pública española otro máster fraudulento y otra tesis copiada”.