Los problemas de financiación autonómica, con retrasos en los pagos por parte del Gobierno central, están copando la actualidad desde que Pere Aragonès, vicepresidente de la Generalitat, amenazara con llevar ante los tribunales al Ejecutivo.

En una entrevista concedida a Es la mañana de Federico (EsRadio), Javier Fernández-Lasquetty, recién nombrado consejero de Hacienda de la Comunidad de Madrid, ha negado que el equipo conformado por PP y Ciudadanos vaya a apoyar la premisa de “aquellos que quieres destruir España”. "Los mismos que reniegan de los tribunales españoles reclaman ahora a los tribunales españoles y los mismos que reniegan de España son los que ahora reclaman a España", ha espetado el consejero.

El rechazo se produce después de que Aragonès pidiera a sus homólogos en las distintas autonomías del país que se sumaran a la presión para acelerar los procesos y forzar al Ejecutivo de Pedro Sánchez a agilizar los pagos. Concretamente, el dirigente reclama el pago de 874 millones en concepto de adelantos pendientes de pago a la Administración autonómica pues, ha criticado, "el Gobierno central tiene retenidos los aumentos de la financiación". 

Si bien el consejero de Hacienda ha rechazado de facto la premisa del dirigente catalán, su compañero Alberto Núñez Feijóo se ha mostrado dispuesto a estudiar la oferta. “No descartamos ninguna vía”, ha alegado, poniendo el foco de la atención en el Gobierno central y los 700 millones de euros que Galicia todavía no ha ingresado.

Así las cosas, Lasquetty evidencia el desequilibrio existente entre los intereses del PP más moderado -encabezado por el presidente de la Xunta- y el ala más conservadora del partido -plasmada en los fichajes de Isabel Díaz Ayuso en las siete consejerías del Gobierno madrileño. Dos posiciones enrocadas y argumentos cruzados que parecen sacados de una hoja de ruta dispar.

Diferencias con el proyecto España Suma

Lasquetty también ha aprovechado su intervención para valorar la posibilidad de sumar fuerzas con el resto de fuerzas de derechas de cara a una posible repetición de elecciones. En la misma línea que la defendida por el presidente del partido, Pablo Casado, el popular ha alegado que "la estrategia del PP tendría que ser la misma pero mejorándola" y que teniendo en cuenta el sistema electoral español "la idea de España Suma es para tomársela en serio".

Sin embargo, el presidente gallego también se mostró distante con la idea promovida por Pablo Casado. Feijóo dejó claro que en Galicia no habría ninguna fórmula parecida, ya que concurriría con las siglas del PP a las elecciones de 2020.