La presidenta del PP de Euskadi, Arantza Quiroga, junto a la secretaria general del PP vasco, Nera Llanos (i), durante la rueda de prensa convocada de urgencia en el Parlamento Vasco de Vitoria. EFE



El PP vasco intenta cerrar la crisis abierta después de que Génova obligara a Arantza Quiroga a retirar la ponencia sobre Libertad y Convivencia presentada en el Parlamento Vasco y con la que la presidenta de los populares vascos pretendía un acercamiento a EH Bildu. En dicha propuesta se exigía a la izquierda abertzale el “rechazo expreso a la violencia” y no la “condena” lo que provocó la desautorización del ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, quien, en declaraciones a la COPE, dijo que EH Bildu "sigue siendo el defensor de ETA" y que "no se puede renunciar" a exigirle "la condena expresa del terrorismo de ETA" y de su "historia criminal". Veinticuatro horas después de haber presentado la ponencia, Arantza Quiroga la retiraba alegando que se había “retorcido” el espíritu de la misma. Y desde entonces, no se ha vuelto a escuchar a la presidenta del PP vasco.

Desde mediodía, y a propuesta de su secretaria general, Nerea Llanos, se reúne en Vitoria el  Comité de dirección del PP vasco, una reunión a la que no ha asistido Arantza Quiroga porque , según Llanos, tiene una cita en Madrid. Algo que no hace sino aumentar las dudas sobre el futuro político de Quiroga.

Esta mañana, desde Bruselas, la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, intentaba zanjar el asunto asegurando que el futuro de Arantza Quiroga es seguir siendo la presidenta del Partido Popular del País Vasco, al tiempo que negaba cualquier división interna o crisis dentro de la formación”. "Ser la presidenta del PP vasco, que es lo que es", respondió Cospedal a la pregunta de cuál es el futuro de Quiroga. Según Cospedal, el PP del País Vasco presentó una moción que fue "utilizada torticeramente y de forma malintencionada por otro partido político", en referencia  a Bildu y ha añadido que "nosotros no estábamos dispuestos a que eso fuera así". La secretaria general del PP ha asegurado que , tras darse cuenta de eso, Quiroga retiró la moción y dijo que plantearía otra en el futuro.

No hay desautorización
"Desautorización absolutamente ninguna, todo lo contrario, absoluto respaldo a lo que hizo como ha tenido siempre y como sigue teniendo. Aquí división ninguna", ha subrayado Cospedal. Según Cospedal, una vez retirada la moción, "no hay nada más", "no hay ningún problema más, ni ninguna crisis más". Preguntada acerca de si se ha reunido o va reunirse con Quiroga, Cospedal se limitó a decir: "Tengo contactos con todos los dirigentes de mi partido todos los días prácticamente", y se negó a dar detalles de lo que consideró reuniones "internas" y "privadas".

Sobre la ausencia de Quiroga de los últimos días en la escena pública, ha dicho que "eso no es una crisis" y justificó que una persona puede descansar cuatro días. "¿Ustedes no descansan?", ha preguntado  a los periodistas.