Todo el mundo sabe de que pie ideológico cojea el escritor y polifacético Juan Manuel de Prada. De izquierdas no es, desde luego, y en sus artículos lo demuestra una y otra vez. En el que este sábado publica el diario 'ABC' vuelve a ponerlo de manifiesto y lo hace, además, utilizando sospechosamente la estrategia planteada y seguida por el Partido Popular nada más conocerse el resultado electoral del 20D. La base de todo es demonstar al PSOE y darlo por finiquitado.

Así lo hace y dice De Prada al señalar que "los sociatas" están llorando "por las esquinas porque Pablo Iglesias les ha arrebatado la socialdemocracia". Es lo más amable que le dedica al partido de Pedro Sánchez cuyos dirigentes y votantes "todavía no se han enterado de que están muertos". El columnista a partir de este momento y hasta que concluye su artículo, empieza con Podemos o, para ser más exactos, con Pablo Iglesias al que considera "asesino" del PSOE al que "nadie podrá negar que, después de asesinarlos, les está haciendo un bonito mausoleo, para que el cuento chino de la socialdemocracia que durante décadas engañó a los incautos pueda seguir engañándolos, convenientemente remozado".

Y así durante un par de párrafos más. Mezcla De Prada la socialdemocracia, el comunismo, el socialistamo, el marxismo, siempre desde una perspectiva negativa, para lanzar sotto voce una mención positiva sobre dos de los adalides del neoliberalismo más rancio: Thatcher y Reagan.

Como dictan los maestros, el principio y el final debe marcar la pauta de un escrito, el objetivo del mismo. Tras apelar al miedo a Iglesias y su populismo, con una especie de alabanza escondida porque así se perjudica más al PSOE, vuelve sobre su propósito: el Partido Socialista.

Lo hace a lo grande, señalando que su secretario general Pedro Sánchez "no se lleva al agua ni a las sirenas; y en apenas unas semanas, el pobre tendrá que elegir si abstenerse en la investidura de Rajoy o de Iglesias". Para De Prada en ambos casos se producirá la certificación "de la defunción de su partido; pero al menos si favorece la investidura de Iglesias podrá decir que se ha sacrificado para que sobreviva la socialdemocracia". Sin comentarios.