260 fallecidos en un festival, impotencia y un recrudecimiento de una guerra, la palestino-israelí, que monopoliza las miradas del mundo entero y provoca bombardeos indiscrimados sobre la frontera de Gaza tras un ataque, el de Hamás, que pilló por sorpresa a Israel y a su presidente, Benjamin Netanyahu, que desde la madrugada del sábado no ha hecho más que volver a prender la mecha soltando frases como que este atentado es homologable al “11-S y Pearl Harbor, todo en uno”.

Más de 250 cuerpos fueron recuperados del sur israelí, en el recinto del festival de música electrónica que se celebraba cerca del kibutz Reim, en pleno desierto de Neguev, según los balances oficiales actualizados por el Servicio de Identificación de Victimas de Desastres (ZAKA), una organización de voluntarios reconocida por el Gobierno israelí que está encargada de la retirada de cuerpos de los fallecidos.

El festival de música fue organizado con motivo de la festividad judía del Sucot, también conocida como Fiesta de las Cabañas o de los Tabernáculos. Esta festividad se extiende cerca de una semana año tras año y se celebra precisamente en las cabañas montadas para la ocasión para homenajear a los peregrinos que protagonizaron la diáspora judía saliendo de Egipto en dirección a la Tierra prometida.

De hecho, tal y como explica la Oficina de Asuntos Religiosos del Ayuntamiento de Barcelona, el Sucot, como fiesta agrícola, “se celebraba como un día de acción de gracias por las cosechas de otoño y, de forma más general, por los dones de la naturaleza durante todo el año”. Es más, según la torá, los judíos deben vivir durante siete días en cabañas para que nadie olvide el mandato otorgado a los judíos que protagonizaron la diáspora.

“De generación en generación celebráis cada año esta fiesta de siete días dedicada al Señor. Observad perpetuamente esta ley en todas las generaciones venideras. Celebrad la fiesta en el mes séptimo: durante siete días deberéis vivir en cabañas. Vosotros, los nacidos en Israel, viviréis en cabañas para que vuestros descendientes sepan que yo hice vivir en cabañas a los israelitas cuando les hice salir de Egipto. Yo soy el Señor, vuestro Dios”.

Levítico 23:41-43

Horas de terror

No tardaron en saltar a las redes sociales las imágenes de terror y los testimonios de cientos de personas que se refugiaban como podían de las balas de Hamás. Algunos se grabaron, otros escribieron a sus familias en forma de despedida, otros trataron de hacerse los muertos para tratar de capear un ataque frontal que ha recrudecido un conflicto histórico, de ocupación y constantemente sometido al escrutinio de entender las derivadas que esconden las relaciones internacionales.

El festival, de música trance y receptor de muchos turistas, comenzó a las 23.00 horas del viernes y se alargó durante toda la noche con miles de asistentes. La gran mayoría eran israelíes jóvenes, de entre 20 y 40 años.

Respuesta internacional

Especialmente rápida ha sido la respuesta de EEUU. La relación de la potencia norteamericana con Netanyahu no pasaba por su mejor momento, pero el inquilino de la Casa Blanca, Joe Biden, no ha dudado en poner armamento a disposición de Israel y mostrar su absoluto apoyo tras el ataque sufrido.

"La ayuda adicional para las Fuerzas de Defensa de Israel está ya de camino hacia Israel y habrá más en los próximos días", trasladaba Biden a Netanyahu este domingo, según un comunicado de la Casa Blanca.

Los dirigentes han abordado las gestiones en marcha para garantizar que ningún enemigo de Israel crea que puede aprovecharse de la situación actual", apuntaba Washington. En ese sentido, Biden expresaba el "apoyo total" de Estados Unidos al Gobierno y al pueblo de Israel ante "este ataque sin precedentes y devastador de los terroristas de Hamás".

Este lunes las notificaciones de la Casa Blanca han seguido y el propio secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, ha anunciado el envío de un portaaeronaves, un destructor y munición a Israel para "proteger al pueblo israelí".

También se está estudiando autorizar el uso de la munición estadounidense almacenada en Israel para su uso en caso de emergencia. Gran parte de esa munición ha sido enviada a Ucrania pese a las protestas de las autoridades israelíes, aunque Washington espera que haya suficiente munición para cubrir las necesidades israelíes.

Balance de fallecidos

A primera hora de este lunes ha sido el teniente coronel Jonathan Conricus, portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), el encargado de actualizar los datos y hacer un nuevo balance de situación “a la espera de más muertes”: “Son los peores días de la historia de Israel”.

Según Conricus, "al final de esta guerra, Hamás ya no tendrá capacidad militar para amenazar a los civiles israelíes... Hamás no podrá gobernar la Franja de Gaza”.

El balance de muertos permanece desactualizado. Los medios de comunicación sobre el terreno siguen haciendo uso de los números notificados este sábado y este domingo: concretamente, se habla de uno 700 muertos israelíes, más de 400 palestinos y un número sin determinar de desaparecidos retenidos por Hamás.