África ha dicho basta a Francia y su visión del continente africano. El presidente galo, Emmanuel Macron, que del 2 al 5 de marzo ha mantenido una gira por África, ha terminado su visita en medio de fuertes críticas por el “tono paternalista” francés. “Esto debe cambiar, la forma en la que Europa y Francia nos trata. Debéis comenzar a respetarnos y ver a África de un modo distinto. Tenéis que dejar de tratarnos y hablarnos con tono paternalista. Debéis respetar a África”, le espetaba el presidente de la República Democrática del Congo (RDC), Félix Tshisekedi, a su homólogo francés durante un encuentro que mantenían ambos este sábado.

“Los esclavos de ayer, hoy ya no se callen ante sus antiguos amos. El mundo multipolar ya está aquí”, añadía Tshisekedi ante la mirada atenta de Macron, que con esta visita -su decimoctava desde que es presidente- finalizaba una gira que le ha llevado a Gabón, Angola, República del Congo y la propia República Democrática del Congo.

Unas duras acusaciones ante las que Macron reaccionó lanzando balones fuera y descargando en la prensa francesa todas las responsabilidades: “Esto no representa al Gobierno francés, no debemos mezclar”. Sin embargo, Tshisekedi rápidamente cortaba al dirigente francés para reafirmarse en las críticas. “No me refería a ningún periodista. Me refiero a las declaraciones del ministro de Exteriores francés”, señalaba el presidente congoleño, visiblemente enfadado.

Para ser más precisos, Tshisekedi se refería a unas declaraciones que realizó el ministro de Exteriores de Macron, Jean-Yves Le Drien, en el año 2019, valorando negativamente la victoria del propio Félix Tshisekedi en las elecciones del Congo, afirmando que se trataba de un “compromiso africano”.

Asimismo, el presidente de la República Democrática del Congo también invitó a Macron a preocuparse por los problemas de Francia y dejar de intentar interferir en los asuntos de los diferentes países que conforman el continente africano. En este sentido, el presidente del Congo instó a su homólogo francés a centrarse en hablar sobre la política exterior de Estados Unidos, la Unión Europea y el resto de grandes potencias.

Por otra parte, Macron también ha recibido críticas en las redes sociales, después de que se viralizara una imagen suya subida a una especie de atril en su visita a Angola. “El colonialismo francés en una imagen”, resumían las redes.

Tshisekedi y Macron espera un nuevo alto al fuego en el este de RDC

Críticas a parte, el encuentro entre Macron y Tshisekedi también sirvió para que ambos dirigentes se mostraran esperanzados de que este martes se declare por parte “de todas las partes en conflicto” un nuevo alto el fuego en los combates entre el Ejército congoleño y el movimiento rebelde del M23. El este del país lleva meses siendo escenario de combates entre el Ejército congoleño y el grupo rebelde. Los enfrentamientos han dejado ya más de 600.000 desplazados y generado una crisis diplomática entre RDC y la vecina Ruanda, que ha negado las acusaciones sobre su presunta vinculación con los rebeldes.

El presidente francés se ha negado a vincular este sábado de manera explícita a Kigali con los rebeldes, pero ha remitido a declaraciones previas del Ministerio de Exteriores galo, que sí apuntan al Gobierno ruandés. Macron sí ha señalado al Gobierno ruandés para pedir a las autoridades que "asuman su responsabilidad" para impedir que el este del país "no se convierta en un botín de guerra".

"Yo he sido muy claro en mi condena al M23 y a quienes lo apoyan", ha declarado el mandatario en declaraciones recogidas por los medios nacionales antes de remitirse al proceso de paz regional en el que actúa como mediador el presidente de Angola, Joao Lourenço. "La solución", ha manifestado, "no puede venir de Francia".

Por su parte, el presidente congoleño ha avisado de que los combates están afectando gravemente al calendario electoral con vistas a la celebración, en principio en diciembre de este año, de las elecciones generales en el país. "El gran problema al que nos enfrentamos en el norte es que necesitamos seguridad para poder seguir con el proceso electoral. De lo contrario, corremos el riesgo de tener un retraso considerable que repercutirá en la fecha de los comicios", ha indicado.

Asimismo, Tshisekedi ha pedido públicamente a Macron una mayor actividad de Francia a la hora de resolver la crisis en el este del país. "Los mensajes del presidente francés son satisfactorios, pero no dejan de ser teóricos. Pido a Francia que haga presión en este sentido", ha añadido en comentarios recogidos también por Radio France Internationale (RFI).