El Vicepresidente de la Comisión Europea y Alto representante para la política exterior y defensa de la UE, Josep Borrell, ha anunciado que viajará “próximamente a China” para poner en marcha la decisión de la Unión Europea (UE) de “recalibrar” sus relaciones con la potencia asiática.

Borrell ha incidido en que el mundo asiste a un proceso de proteccionismo económico en el que las ayudas estatales a las industrias y sectores productivos se han generalizado tras la pandemia del Covid. “No sólo China” subvenciona sus empresas, puntualizó el Alto Comisionado, pero dado el peso que la superpotencia asiática tiene en las relaciones comerciales con Europa, la Comisión Europea quiere nuevos parámetros de relación tal y como anunció la presidenta de la Comisión Úrsula Von der Leyen en su discurso sobre el estado de la Unión.

Garantizar la Victorio de Ucrania

Josep Borrelll explicó a los medios españoles que hay “ocho retos clave para la política exterior y de seguridad de la Unión Europea". El primero de todos ellos y en el que puso especial énfasis fue “garantizar la victoria de Ucrania en la guerra”. No se puede permitir que Putin controle Ucrania “ni política ni geográficamente”, aseveró el político español.

El segundo reto es “recalibrar las relaciones con China, el tercero gestionar y potenciar las relaciones con las nuevas potencias emergentes, especialmente en América Latina y África.

En cuarto lugar situó “repensar el concepto de seguridad”, punto en el que no se explayó pero señaló que un mundo más multipolar no es necesariamente un mundo donde el poder esté más repartido. Enlazando con este punto explicó que el quinto reto es “invertir coordinada y colectivamente en la defensa europea”.

En sexto lugar situó “el doble imperativo de la ampliación de la UE y de la votación por mayoría cualificada” dado que en su opinión, compartida por la mayoría del colegio de Comisarios, “no se puede ir a una Unión Europea de 37 países y tener que tomar las decisiones por unanimidad”.

La séptima prioridad es asegurar el cumplimiento de la Agenda 2030, “esencial para los países en desarrollo para combatir el cambio climático”. Cierra el grupo de prioridades de la UE impulsar la presencia europea en el Sahel, donde Rusia mantiene “mucha presencia y muy activa”.