Salvador Illa ya no ostenta la condición de ministro de Sanidad sino de candidato del PSC a la Generalitat. Y por mucho talante que haya tenido hasta la fecha, de facto, se ha convertido en la diana de sus socios de Gobierno, Unidas Podemos, que también pugnan por la Generalitat.

En este sentido, el vicepresidente segundo y ministro de Derechos Sociales y Agenda 2030, Pablo Iglesias, optó por una ofensiva pasiva-agresiva durante una entrevista en TV3.

El líder morado dijo que no quería entrar a valorar el paso dado por Illa porque él era el vicepresidente, pero si se aventuró a una envenenada reflexión: “Es el papel de los grandes poderes mediáticos. Creo que la sociedad catalana sabe muy bien que cuando alguien tiene muchos apoyos mediáticos no los tiene porque vaya a hacer políticas de izquierdas o políticas sociales. Y creo que eso es algo que la sociedad catalana entiende incluso mejor que la sociedad española por experiencia propia y creo que puede ser determinante en estas elecciones”. 

El vicepresidente segundo reflexionó que “el exceso de apoyos mediáticos o el comportamiento tan inequívoco de algunos medios quizás tenga un efecto contraproducente”. 

De hecho, Iglesias ha insistido: “Que cada uno saque sus propias conclusiones. Yo soy clarísimo. Creo que ha sido evidente el comportamiento de determinados poderes mediáticos. Hasta el punto de que ha habido un debate incluso en los círculos del periodismo de se está notando demasiado cuáles son los intereses económicos que representan esos grupos mediáticos. Y lo que digo es cristalino: nunca grupos mediáticos privados apoyan a nadie que pueda hacer políticas de izquierdas, de defensa de Sanidad Pública o de defensa de los servicios públicos”.