Un informe de la Guardia Civil ha acreditado que el exsecretario general del PP de Madrid Francisco Granados mantuvo cuentas abiertas en Suiza entre los años 2000 y 2006 y que parte de este capital se transfirió a su entonces socio, el constructor David Marjaliza. y terminó en Singapur a nombre de terceros.

Los investigadores han concluido que el flujo de capitales se produjo apenas medio año después de que el exdirigente del PP, y uno de los más cercanos colaboradores de Esperanza Aguirre, llegara a la Alcaldía de Valdemoro, en 1999. 

El informe, que ha sido incorporado al sumario del caso Púnica, que investiga la Audiencia Nacional desde 2014, fue encargado a la Oficina de Recuperación y Gestión de Activos (ORGA) y que recoge el rastro del dinero de imputados en Costa Rica, Estados Unidos, Islas Vírgenes Británicas, Islas Mauricio, Mónaco, Suiza, Panamá y Uruguay, según adelanta La Información.

Una cuenta con su pareja en BNP Paribas

La Guardia Civil ha seguido el rastro del dinero de Granados en Ginebra y, en concreto, en la cuenta que abrió con su pareja Nieves Alarcón en BNP Paribas.

El exdirigente del PP declaró que se trataba de dinero que procedía de unos fondos de Suiza los cuáles repatrió cuando accedió a su primer puesto político en el Gobierno de Madrid.

Sobre el exsocio de Granados, David Marjaliza, que colabora con la Justicia, éste reconoció que abrió cuentas también en Suiza y Singapur y que movió fondos desde España a estos países ayudándose para ello de sociedades instrumentales. El constructor llegó a participar en más de 90 cargos administrativos de cerca de 60 sociedades, según el informe de la Guardia Civil.