Pedro Sánchez y Pere Aragonès coincidirán este viernes en las jornadas del Círculo de Economía en Barcelona. El encuentro se producirá justo un día después de que la directora del CNI, Paz Esteban, confirmara que entre los investigados bajo autorización policial se encuentran president de la Generalitat presumiblemente antes de ser investido, y el entorno del expresident Carles Puigdemont, como el director de su oficina, Josep Lluís Alay.

Automáticamente esta relevación ha sido tachada de "grave" por el president, que en un comunicado difundido este jueves indica que "aumenta la gravedad del caso (..) contra las instituciones catalanas y el independentismo".

Aragonès indica que se trata de una "flagrante vulneración del derecho a la intimidad, de participación política e institucional, tanto de las personas espiadas como de todas aquellas que se han relacionado" y exige al Gobierno que "desclasifique inmediatamente la autorización judicial para conocer sus motivaciones y poder ejercer el derecho de defensa", así como una respuesta "al más alto nivel" y "la asunción de responsabilidades".

Ambos presidentes estarán presentes en el acto de entrega del II Premio Cercle d'Economia a la Construcción Europea a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, que se llevará a cabo después de la intervención de Sánchez en estas jornadas.

Será la primera vez que Sánchez y Aragonès coinciden desde que trascendió primero el espionaje a una sesentena de líderes y personas relacionadas con el independentismo, entre ellas el propio presidente de la Generalitat, y luego que los teléfonos móviles del mismo jefe del Ejecutivo central, la ministra de Defensa, Margarita Robles, y el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, también habían sido infectados con el software Pegasus.

Desde el inicio de la polémica por el caso de espionaje, Aragonès y el Govern han elevado el tono ante el Gobierno para exigir que aclare el espionaje, asuma responsabilidades y haya dimisiones, y han restringido las relaciones porque consideran que las confianzas entre ambos gobiernos se han roto.

El hecho de que el Gobierno anunciara que Sánchez y Robles han sido afectados por el espionaje no ha hecho rebajar la presión ni las críticas del Govern, ya que creen que son dos asuntos diferentes y recriminan que hayan reaccionado de manera distinta cuando las escuchas han afectado al presidente del Ejecutivo y a la ministra que cuando solo afectaba a independentistas.

De hecho, el miércoles en la jornada inaugural de la Reunió Cercle d'Economia el presidente de la Generalitat acusó a Sánchez de "dinamitar" la vía del diálogo con su gestión del caso de espionaje y le reclamó que se produzca un punto de inflexión y depure responsabilidades.

Aragonès no escuchará a Sánchez, pero no descarta reunirse con él

Este miércoles la Generalitat informaba de que Aragonès irá solo al premio que se le otorga a la presidenta de Comisión Europea Ursula von der Leyen y que abandonará el lugar para no escuchar a Pedro Sánchez.

No obstante, no se ha descartado que vayan a verse, aunque considerarían que “una reunión de veinte minutos no es suficiente para dar las explicaciones necesarias”.