La reunión ha suscitado un enorme interés político y mediático porque se ha rodeado de cierto secretismo. La pidió Esperanza Aguirre y el objetivo es conseguir que el Gobierno de España, con toda su potencia, apoye la candidatura de Madrid frente a Barcelona para acoger el controvertido proyecto de “Eurovegas”.

La promesa de crear 200.000 puestos de trabajo es lo que ha “obsesionado” a la Presidenta madrileña. Poder vender que ella crea empleo le importa más que ganar la batalla de símbolos a los catalanes, aunque eso sería la guinda, poder decir que Madrid gusta más fuera de España que Cataluña. Ya que la capital se queda sin Juegos Olímpicos que lanzaron a la capital catalana al estrellato mundial, consigamos hacer de la Comunidad Madrileña uno de los grandes casinos mundiales.

Da igual que su promotor, el polémico Shaldon Adelson, pida que las Leyes españolas no se le apliquen a él (que se permita fumar, contratos como le de la gana, etc.), da igual que a este señor no se le cobren impuestos o se le permita tributar en otros sitios, o llevarse la pasta a paraísos fiscales. Todo da igual ante la posibilidad de que Esperanza Aguirre salga en todas las televisiones afirmando que en Madrid baja el paro.

Hasta ahora Rajoy no se ha querido mojar en este asunto cuya solución definitiva se acerca a la recta final. Shaldon Adelson quiere garantías de que se va a poder saltar la Legislación española a la torera y, quizá, eso se lo pueda garantizar una presidenta autonómica de su propio partido y no un presidente de la Generalitat que ha iniciado una deriva independentista preocupante.

Pero puede haber sorpresas de última hora. Según ha podido saber ELPLURAL.COM, alguna otra Comunidad Autónoma, con mayoría absoluta aplastante del PP, y cuya economía depende del turismo se ha ofrecido a acoger el proyecto. Una competidora de última hora que podría llevarse el gato al agua dejado a Esperanza Aguirre compuesta y sin casino.