La política de fichajes de fuera de Andalucía con destino a alto cargo de la Junta de Andalucía no para. La Consejería de Presidencia de Elías Bendodo se está convirtiendo en un asilo para antiguos altos cargos caídos en desgracia y sin puesto en el organigrama de otras administraciones del PP. Así fue con el polémico nombramiento del ex diputado del Parlament catalán y posterior delegado del Gobierno de España en Cataluña entre noviembre de 2016 y junio de 2018 con Mariano Rajoy, Josép Enric Millo. El catalán aterrizó en tierras andaluzas recientemente como flamante secretario general de Acción Exterior de la Consejería de Presidencia de la Junta. Ahora Moreno Bonilla vuelve a marginar a miembros del PP andaluz -como si no hubiera personas válidas en este- tras nombrar ayer en su Consejo de Gobierno como nuevo secretario general de la Presidencia al exdiputado del PP Tomás Burgos, quien fue secretario de Estado de Seguridad Social en 2011 en el Gobierno de Mariano Rajoy.

El cargo de Tomás Burgos estará adscrito a la Consejería de la Presidencia, Administración Pública e Interior, que gestiona el popular Elías Bendodo, y sus competencias son las actuaciones dirigidas a proporcionar información política y técnica y asesoramiento al titular de Presidencia así como la realización de análisis y estudios que faciliten la acción del Gobierno y las relaciones de carácter institucional.

Una vida política sin relación con Andalucía

Nacido en Valladolid, Burgos fue procurador regional por esta circunscripción en las Cortes de Castilla y León en 1987 y procurador regional en 1991. Posteriormente ocupó el cargo de secretario de Estado de la Seguridad Social en 2011 con el Gobierno de Mariano Rajoy siendo también diputado nacional por Valladolid entre 1993 y 2012.

El nombramiento no ha sido bien recibido entre la oposición que considera que Moreno Bonilla y Elías Bendodo está usando el Gobierno andaluz como asilo para amigos “sorayistas” a los que se le busca destino en Andalucía sin tener relación ni conocimiento alguno en Andalucía como ocurrió con Millet o un responsable de Salud de gobierno del PP en la Castilla La Mancha.

Falseó su curriculum

Pero a además a Tomás Burgos se le ha recordado el hecho de que cuando fue secretario de Estado de la Seguridad Social con Rajoy falseó su currículum.

Tras ser nombrado para este cargo en diciembre de 2017 apareció en la referencia oficial del Consejo de Ministros que era “médico y experto en gestión sanitaria”. También en la página web del Congreso de los Diputados se podía leer: “Medicina y Cirugía. Universidad de Valladolid”.

Posteriormente generó una intensa polémica al comprobarse que este dato era falso ya que Burgos no completó los estudios de Medicina en la Universidad de Valladolid. Aunque se intentó responsabilizar a los servicios de la web del Congreso, luego se demostró que no era la primera vez que Burgos se atribuía falsamente la condición de médico. En su ficha personal de la legislatura 1993-96 también constaba ser “licenciado en Medicina”. En su CV de la legislatura 96-2000 añade además “Cirugía” así como en la reseña de diputado entre 2000 y 2004 aparece también lo de “licenciado en Medicina”: Once años, de 1993 a 2004, Burgos mantuvo la falsedad de su CV al Congreso con un título que no tenía.

“Mentir sin despeinarse”

El senador socialista por Málaga, Miguel Ángel Heredia, ha criticado este aterrizaje de Tomás Burgos en la administración andaluza con el siguiente texto en Twitter: “El Trifachito ficha como secretario general de la Presidencia en Andalucía a un vallisoletano que mintió en su curriculum: aseguró durante 11 años que era médico pero nunca lo fue. Al menos tiene un valor fundamental para el PP, mentir sin despeinarse”.