Los ‘audios secretos’ de Vox que ElPlural.com empezó a destapar en exclusiva desde la semana pasada ponen contra las cuerdas al partido de extrema derecha, pero también a todo el entramado que de una u otra forma sostiene a los de Santiago Abascal (y que en última instancia son Vox); complicado de entender si no se ha hecho un seguimiento exhaustivo de hasta dónde llegan los tentáculos de la ultraderecha en nuestro país.
En estas, aparece lo que coloquialmente se conoce como el “búnker”, o lo que es lo mismo, la sala de operaciones con nombre y apellidos propios que tiene a los mandos a Kiko Méndez-Monasterio, Gabriel Ariza (hijo del todopoderoso Julio Ariza), y el propio presidente de Vox.
En el centro de la polémica que compromete al partido de extrema derecha y hace que se tambaleen los cimientos no solamente de la formación, sino de toda una estructura muy bien armada que permite que la ideología ultra tenga el peso en las instituciones de hoy más allá de siglas e ideas, aparece Revuelta. Todo está interconectado.
¿Eres capaz de descubrir la palabra de la memoria escondida en el pasatiempo de hoy?
La sociedad juvenil vinculada a Vox, en la base de ese desvió de fondos que deberían haber ido para los afectados de la DANA y contó con el silencio de miembros del partido, es solo la punta del iceberg del escándalo. Sus chicos son los principales señalados, pero no los únicos, en la guerra civil desatado en la derecha a la derecha del PP.
Siguiendo un orden cronológico, el movimiento juvenil lo impulsa Jaime Hernández Zúñiga, conocido a partes iguales como “el Pelos” para quienes le guardan estima -debido a su melena rizada- o “El Hondureño” para sus detractores, atendiendo al país de origen de su madre.
Histórico de Vox hasta el punto de conocer a Abascal primero cuando todavía era menor de edad, y a Enrique Cabanas después, en 2019 -este segundo vicesecretario nacional de Presidencia- salta a Europa de asesor. Se mueve entre Bruselas y Madrid, ya que vuelve a la capital para las elecciones en la Comunidad, y su hermana, candidata a su vez por Coslada se casó con Manuel Mariscal. El dato, que puede resultar baladí, no lo es, pues el diputado es precisamente una de las voces que se oye en los audios desvelados por este periódico. Es importante no perderse.
Cuentas opacas
En 2023 Jaime y otros jóvenes impulsan Revuelta y agitan la calle al calor de Vox por cuestiones como la Amnistía a los presos catalanes. A continuación, ante la necesidad de dar forma legal al proyecto se sirven de la Asociación Social de Mayores (Asoma), creada desde la vicesecretaría de Movilización cuando estaba al borde de la desaparición.
Ahí, se crea la Junta Directiva, que contiene más personalidades propias como Arturo Villa -voz principal de las conversaciones sobre la DANA y asesor de Jorge Buxadé-, o el propio europarlamentario, en esta ocasión seguramente los más destacados.
El idilio entre Vox y sus cachorros se plasma oficialmente con los audios y el resto de documentación que golpea el posible desvío de fondos destapado por ElPlural.com. A finales de octubre, Arturo Villa envía un email al número uno de Revuelta quejándose de que nunca se le había permitido revisar las cuentas ni información previsiblemente delicada sobre Asoma.
Hernández, presidente de Revuelta se niega y Villa lo denuncia ante la Fiscalía. No solo denuncia, sino que lo hace público, mientras que el primero desmiente cualquier acusación de desvío de fondos.
Además de esta batalla a ojos de todo el mundo, la cronología de audios publicada por ElPlural.com recoge las conversaciones entre Villa y Mariscal (no hay que olvidar que ese segundo es diputado de Vox en el Congreso), y demuestra que las siglas ultraderechistas intentaron disolver la organización juvenil en lugar de tomar cartas sobre el asunto ante la posible corrupción de la que el partido era conocedor, incluso el propio Abascal; mientras Buxadé trató de ocultarlo todo con el fin de Revuelta.
“Kiko insinuó meternos pasta”
En los últimos días han salido a la luz otras conversaciones entre la junta directiva de Revuelta y la cúpula de Vox en las que se planea, por ejemplo, que la formación se quiso quedar con la asociación. “Kiko insinuó meternos pasta”, reza un intercambio de comunicaciones que publica La Razón.
Y añade, a las informaciones de ElPlural.com, otros de El Mundo, que reza que Vito Quiles “se está haciendo un tour por las universidades” y que están “dejando un espacio que no nos podemos permitir”.
En estas aparece las reuniones de la cúpula de Santiago Abascal con miembros de Revuelta, cuya parte más reveladora es en la que hablan con la secretaria general adjunta de Vox, Montserrat Lluis, con el secretario general de Revuelta, Pablo González Gasca -que también aparece en las revelaciones de ElPlural.com-
Dicho encuentro se celebra el 17 de octubre de este año en la sede de Disenso -fundación de Vox-. En ella, una confiesa al otro que Abascal conoce los pormenores del caso y que él mismo se ha implicado para ordenarles a ella y a Buxadé que lo arreglasen antes de que el escándalo saltase a la prensa.
Acabar con el “portavoz” de Revuelta: “Santiago preguntándome desde las 7 de la mañana”
Lluis pone de manifiesto la falta de profesionalidad de Vox y pide una auditoría para cerciorarse de que no hay irregularidades en Asoma. “¿El partido se conformaría con una auditoría de Deloitte?”, pregunta Gasca, a lo que ella responde con un “totalmente”. No obstante, para Vox ya no bastaba y exigió saber las cuentas a través de Buxadé. Y terminar en última instancia con la organización juvenil.
En todo este maremágnum, Lluis cuenta cómo Abascal le pregunta sobre el tema: “Porque a mí Santiago (Abascal) me pregunta: 'oye, ¿cómo está esto? ¿Qué van a hacer?' Pues es que no me ha contestado. ¿Tú qué crees que me dice Santiago cuando le digo el domingo que no me contesta (Jaime Hernández) y no sé lo que va a hacer?”. “Y Santiago, pues desde las 7 de la mañana preguntándome si había podido averiguar esto. Y yo le digo 'no, no me contestan'. Pues claro, el lunes, como una moto...”. Y esta es solo una de las conversaciones en las que aparece el líder de Vox.
Cuatro días antes del encuentro, el tuitero Pau Ruiz, cuya mujer se autodenominó “portavoz” de Revuelta desliza unos mensajes en los que revela que el objetivo del “búnker” pasa por terminar con el presidente de Revuelta; alias “El Pelos”.