El Gobierno registró este 24 de marzo en el BOE una obligación para todas las farmacéuticas. Se basa en informar del stock disponible de ciertos medicamentos, así como la obligación de fabricar determinado tipo de fármacos por encima de otros en caso de necesidad.

“La situación de crisis sanitaria ocasionada por el Covid-19 hace necesario disponer de información actualizada sobre la disponibilidad real y la previsión de fabricación de determinados medicamentos que se consideran esenciales en esta emergencia. Igualmente, para proteger la salud pública, resulta ineludible garantizar el abastecimiento de estos medicamentos en centros y servicios sanitarios y ello requiere una distribución diaria capaz de cubrir el consumo con la agilidad necesaria”, explica el precepto, tal y como ha recogido íntegramente el diario El Mundo.

En la lista que se adjunta figuran ciertos medicamentos como el paracetamol o la insulina de los diabéticos, pero también algunos fármacos que se están investigando y utilizando en la crisis del coronavirus.

Tocilizumab, lopinavir/ritonavir o la hidroxicloroquina son estos medicamentos, que, pese a no tener todavía eficacia probada, “es uno de los fármacos que más se están empleando frente al Covid-19”, explica Olga Delgado, presidenta de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH).

Una eficacia que sigue siendo baja, como ha confirmado la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS), pero que, sin embargo, acumula una cierta fama tras ser probada de forma experimental por laboratorios chinos para contener la pandemia.