El PSOE celebrará este fin de semana en Valencia su convención municipal, a la que asistirán unas 2.000 personas entre militantes, alcaldes, concejales y representantes de diversos colectivos. Durante el cónclave, con la plana mayor socialista desplazada a la capital del Turia, debatirá y previsiblemente aprobará un programa marco municipal con unas 80 medidas. Un documento en el que tendrá un papel protagónico la vivienda. Así lo ha detallado en rueda de prensa el responsable de política municipal de Ferraz, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, quien ha avanzado que la Ley de Vivienda “verá la luz en los próximos días”.

La comparecencia de Gómez de Celis ha alimentado las especulaciones en torno al articulado de Vivienda, que desde hace meses coge polvo en los cajones del Congreso de los Diputados. La política de vivienda adquiere un peso específico en una campaña electoral que estará impregnada de un intenso aroma social, máxime cuando en los últimos barómetros del CIS, esta área ha ascendido hasta la cuarta posición en las preocupaciones de la ciudadanía, lo que dota de una reseñable trascendencia una cuestión enquistada, pero con visos a desbloquearse en los próximos días.

La vivienda será crucial en el programa marco del PSOE para las municipales, por lo que abrir los grilletes que encadenan a este articulado supondrá un impulso de cara a las urnas el próximo 28 de mayo. Desde Ferraz, este jueves, el responsable de política municipal, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, desgranaba algunas de las propuestas relativas al alquiler de la vivienda social, que incluye la creación de un sistema público de precios de referencia en base a una Ley de Vivienda que “en los próximos días podremos ver ya nacer”. El PSOE incluirá también en su programa marco iniciativas destinadas a frenar la proliferación de pisos turísticos y evitar, de este modo, la “expulsión de vecinos” por el encarecimiento de los alquileres. Incluso se ha sugerido el uso de suelo público para vivienda en régimen de cohousing.

¿Negociaciones desencalladas?

Las palabras del dirigente socialista inducen a pensar que el acuerdo entre las partes está próximo. No obstante, en Moncloa se ha corrido un tupido velo en torno a las conversaciones para desencasquillar una bala crucial para la izquierda. Los socios que conforman el Ejecutivo y los aliados parlamentarios del mismo optan por la prudencia, aunque sí que apuntan a ciertas señales que abonan el optimismo de una coalición que atraviesa un momento de fragilidad.

De hecho, según ha publicado El Confidencial, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, habría acelerado la operación de desbloqueo. En las últimas horas, según revela esta información, el jefe del Ejecutivo habría iniciado las conversaciones con la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, para rubricar un acuerdo de manera inminente. El citado medio apoya su publicación sobre fuentes próximas a las negociaciones, que aseguran que el pacto “está cerca”. Los actores exhiben un optimismo sostenido,  pero apelan a la discreción para evitar que injerencias externas trunquen los avances registrados.

Converge la implicación de Sánchez en las negociaciones con el papel protagónico que la vivienda adquirirá en la campaña electoral y, por ende, en el cónclave municipal de este fin de semana, que, por cierto, clausurará el presidente del Gobierno del domingo. En el horizonte, otra de las lecturas de esta estrategia, que pasa por dejar en manos de las autonomías la decisión de limitar o no los precios. De esta manera, Moncloa forzará a los líderes regionales a retratarse y exhibir su postura públicamente, obligando a aquellas autonomías conservadoras a retratarse en un nuevo pulso al Partido Popular.

En virtud de este articulado, Génova dio manga ancha a sus barones territoriales para posicionarse como mejor consideraran. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, adelantó en su momento que elevaría la ley al Constitucional, fundamentando su respuesta con base al “ataque frontal e inaceptable contra la libertad de la propiedad”. Camino idéntico al que adoptará Juanma Moreno. No obstante, la jugada del PSOE no va orientada en exclusiva a los candidatos regionales, sino también a los municipales. Entre las competencias de los alcaldes se encuentra la aplicación -o no- de medidas vinculadas a la subida del IBI para penalizar a la vivienda vacía y, por ende, favorecer su salida del mercado para aligerar el acceso a la vivienda.

En Ferraz esperan que la Ley de Vivienda no solo ampare la campaña del 28 de mayo. El PSOE acordó la introducción de una enmienda para reducir el plazo desde su aprobación para aplicar la regulación de alquileres a seis meses, en lugar de los 18 que contemplaba el texto original. De esta manera, los socialistas se aseguran que el paraguas electoral de uno de sus articulados estrella también cubra el arranque del curso político tras el parón estival.