La exsecretaria general de Vox en el Congreso, Macarena Olona, ha denunciado haber sido espiada por Tizona Comunicación S.L., la empresa de Gabriel Ariza y Kiko Méndez Monasterio, encargada de llevar la comunicación de Vox y que tal y como ha desvelado ElPlural.com, ha facturado en solo 5 años la friolera cantidad de 3.771.854 euros

Así lo ha expuesto la exdirigente de Vox en 'Soy Macarena’, su libro de memorias editado por La Esfera de los Libros, al que ha tenido acceso en exclusiva este periódico.

Olona explica que cuando fue designada candidata de Vox a la Junta de Andalucía, recibió ayuda de Tizona Comunicación, a la que denomina como empresa asesora de cabecera de Vox, para llevar la comunicación de su campaña, así como preparar sus intervenciones en los debates.

Según desvela Olona, Tizona le impuso en su equipo a Miguel Rovira, al que en el mundo de las redes y en Vox se le conoce como “el joven europeo”. Siempre según el relato de la expolítica de Vox, Miguel Rovira incluso se instaló en la casa que habían alquilado en Salobreña para instalarse en campaña electoral.

“Un día, en una reunión en la sede de Bambú, Enrique Cabanas me informó de que iba a venir a instalarse con nosotros un trabajador de Tizona Comunicación al que yo no conocía de nada, un tal Miguel Hernández, al que en el mundo de las redes y en Vox se le conoce como el joven europeo. Ante esto, puse el grito en el cielo y me negué, porque yo soy muy mía. En mi esfera personal, en mi ámbito privado y de intimidad no me gusta que entre cualquiera, sobre todo si no he tenido trato con él de antemano. Yo ya sabía lo que era una campaña, lo larga que se hace, los roces que provoca el desgaste, la intensidad de los días eternos, el cansancio acumulado. Por eso quería mantener —al menos en esa casa que era sitio de trabajo, pero también de descanso y desconexión— un clima confortable entre mi equipo (…) Al final tuve que tragar, era un trabajador y un empeño de Kiko (Méndez Monasterio)”.

En este contexto, Olona se muestra tajante: "No me di cuenta hasta después, de que el ‘joven europeo’ era un topo. Su cometido era prepararme lo que yo tenía que decir en cada discurso de cada mitin con Santiago (…) No supe hasta después, que entre las tareas del ‘joven europeo’ estaba controlar y apuntar lo que yo había dicho o dejado de decir de los documentos que me habían pasado, cuánto tiempo dedicaba a colocar sus directrices y cuánto a divagar y a desviarme en mis propios mensajes, los que me nacían de dentro”.

Olona habla de un “control exhaustivo” que incluía la elaboración de informes a raíz de extensas labores de “espionaje y control”.

“El caso es que el ‘joven europeo’ hacía ese seguimiento exhaustivo y, a veces, manipulado, porque, según supe después, tenía que pasar un informe a Madrid. Aún sin saber todavía que aquel chico era la persona que me habían puesto para espiarme y controlarme, como si de la Gestapo se tratase, tuve una enganchada muy gorda con Santiago Abascal y Ángel López Maraver a cuenta de estos marcajes”.

Así describe Macarena Olona a Tizona

En otro pasaje del libro, Olona se refiere al entramado de Tizona y a los intereses que la empresa comparte con otras sociedades en la calle Nicasio Gallego de Madrid.

“Tizona Comunicación es la empresa asesora de cabecera de Vox, propiedad de Kiko Méndez-Monasterio y Gabriel Ariza. A través de ella, entre otras sociedades, es por donde factura esa dupla Méndez-Monasterio/Ariza Jr. De hecho, en Tizona Comunicación es donde yo preparé los debates. La primera vez que entré allí, en la calle Nicasio Gallego de Madrid -antigua sede de Vox alquilada en el año 2019 a una mercantil donde figuraba como apoderado el otrora vicepresidente del partido, Víctor González Coello de Portugal-, comprobé que se ubicaba en el mismo edificio donde se halla el Instituto Superior de Sociología, Economía y Política, ISSEP, donde está ‘La Gaceta de la Iberosfera’, el panfleto digital fundado por Vox en 2020 después de comprar la antigua ‘La Gaceta de los Negocios’, el extinto medio de la antigua Intereconomía de Julio Ariza. Me presentaron a toda la gente que trabajaba allí en un confuso conglomerado de sociedades. Una era la esposa de Ariza Jr. Realmente, hasta que no fui designada candidata no vi ni palpé el entramado societario que se ha levantado en torno a Vox y que ha hecho de la bandera de España un negocio para algunos. Sí conocí con anterioridad la sede de la Fundación Disenso, creada por Vox en el año 2020, situada en la calle Antonio Maura, dirigida por Jorge Martín Frías, ex responsable de formación de FAES, la antigua fundación del PP, y candidato no electo de Vox en las pasadas elecciones generales de junio de 2023 por Madrid. Acudí a Disenso para reunirme con Luis del Rivero, un hombre muy próximo a Santiago Abascal, de esos pocos a los que Santiago escucha de verdad. Un día, Santi me dijo que Luis quería tener una conversación conmigo, y me citaron en un piso próximo al Congreso. Ese día fue la primera vez que pisé la sede de la Fundación. Posteriormente, durante la campaña, volví algunos días para trabajar tanto con gente de Tizona Comunicación como con gente de Disenso, si es que hay alguna diferencia”.