Este martes el Gobierno anunciará cuál es el protocolo para la desescalada gradual del confinamiento. Tal y como explicó el pasado domingo el propio presidente, Pedro Sánchez, este proceso se realizará por fases y no será homogéneo en todo el territorio, atendiendo pormenorizadamente a la situación que atraviesa cada comunidad autónoma. Eso sí, pese a que cada región avanzará de una forma distinta dependiendo de sus particularidades, lo hará siguiendo unas reglas comunes. Una serie de indicadores que serán visibles por todos los ciudadanos marcarán la posibilidad de seguir avanzando.

El líder del Ejecutivo no quiso dar más detalles, asegurando que se conocerían a partir de este martes y que estaban siendo estudiados por los expertos que asesoran al Gobierno central, atendiendo, además, las demandas y propuestas de las comunidades autónomas. Son precisamente las administraciones regionales las que solicitan un mayor peso a la hora de coordinar el desconfinamiento de sus territorios.

Escuchadas todas sus pesquisas y con la salida de los niños, permitida desde este domingo, como referencia, el Gobierno baraja limitar las salidas por franjas horarias. Una medida que ya propusieron ciertos dirigentes como Quim Torra, president de la Generalitat, que haría que cada persona pudiese salir en una franja determinada, evitando las conglomeraciones y reduciendo el impacto de los momentos centrales del día. El Gobierno andaluz, a su vez, también es defensor de este modelo, y no ha dudado en exponer una posible hoja de ruta: que las personas mayores salgan de 9 a 14 horas y los niños de 16 a 21 horas.

Las imágenes del cauce del río Turia en Valencia, la avenida Diagonal en Barcelona, las playas de Cádiz o la plaza de Goya en Madrid no han gustado al Ejecutivo. El Gobierno sostiene que ha sido muy difícil llegar hasta aquí. Los contagios y los fallecidos descienden progresivamente, pero mantenerse alerta es clave para evitar un nuevo brote que sería fatal para el sistema sanitario y la economía.

Todos los epidemiólogos sentencian que la máxima a seguir es que se garantice el distanciamiento social establecido para evitar contagios -dos metros aproximadamente-. Esta medida que se someterá a debate del consejo de ministros este martes provocaría que una menor afluencia de gente pudiese pasear en momentos concretos en las calles, haciendo más factible el cumplimiento de las limitaciones sanitarias.

A las recomendaciones se sumarán las multas. Tal y como ha manifestado el ministro de Interior, este domingo se llevó a cabo una actitud “pedagógica”. Sin embargo, el incumplimiento de las limitaciones será sancionado. Por el momento, desde que empezara el estado de alarma, la policía ya ha detenido a cerca de 7.000 personas y se han ejecutado más de 776.000 propuestas de sanción.