El director, guionista y productor estadounidense Francis Ford Coppola ha obtenido hoy el Premio Princesa de Asturias de las Artes por ser un "narrador excepcional" y haber contribuido, desde la independencia emprendedora y creativa, a la transformación y crecimiento de la industria cinematográfica. En 2002 ese mismo reconocimiento recayó en otro director estadounidense, Woody Allen, que estrechaba así sus vínculos con España y que rodaba poco después Vicky Cristina Barcelona tirando de algunos estereotipos sobre el país. Ahora en las redes han aprovechado el galardón para recordar a Coppola que en España tiene material de sobra para rodar películas sobre corrupción.

 

 

 

 

 

 

 

 

El director podría contar incluso con localizaciones que conoce bien y testimonios de primera mano, ya que se ha mostrado interesado en los estudios cinematográficos de la Ciudad de la Luz en Alicante, uno de los proyectos faraónicos del PP en la Comunidad de Valencia a los que ahora hay que buscarle alguna salida para recuperar al menos una parte de los millones invertidos.