La Consejería de Igualdad del Gobierno de Castilla-La Mancha ha mostrado su preocupación después de que PP y Vox hayan acordado reducir el nombre de la Casa de Acogida para Víctimas de Violencia de Género de Ciudad Real a simplemente Casa de Acogida. Lo ha hecho Sara Simón Alcorlo, consejera de la cartera castellanomanchega, a través de una carta remitida a Miguel Ángel Valverde, presidente de la Diputación.

Se trata de la primera casa de acogida para mujeres maltratadas en Castilla-La Mancha, y la tercera en España. Fue hace años cuando pasó de tener la denominación de ‘para mujeres maltratadas’ para pasar a llamarse Casa de Acogida de Víctimas de Violencia de Género, y ahora PP y Vox deciden eliminar esta distinción para dejarle un simple Casa de Acogida.

Ha sido con la nueva estructura de la Diputación de Ciudad Real, liderada por el popular Miguel Ángel Valverde, que gobierna con Vox, cuando se ha establecido este cambio. Y es Encarnación Medina Juárez, del PP, la diputada encargada de esta área.

En concreto, la reestructuración de las áreas de la institución supone que la Casa de Acogida quede incluida en el área de Atención a las Personas, bajo cuyo paraguas se encuentran los Servicios Sociales, Atención a las Personas Mayores, Recuperación de Toda la Memoria, Cooperación Internacional, Escuela Infantil Flauta Mágica y Residencia Santo Tomás.

La carta de la consejera de Igualdad

“En lo que al Gobierno regional se refiere, confío en que la institución que ahora preside siga dando los pasos necesarios para hacer efectivo el derecho de toda la ciudadanía de Castilla-La Mancha, especialmente de las mujeres, a vivir libres de violencia de género. Un derecho que consagra la Ley 12/2010, de 18 de noviembre, de Igualdad entre Mujeres y Hombres de Castilla-La Mancha”, ha comenzado la consejera su carta, después de felicitar al presidente de la Diputación por su reciente nombramiento.

Quiero mostrarle mi preocupación por la decisión que acaban de adoptar por la que se modifica la denominación de la Casa de Acogida de Víctimas de Violencia de Género, reducida ahora, simplemente, a Casa de Acogida”, ha explicado Simón. En el mismo sentido, ha añadido: “Negar la existencia de la violencia de género imposibilita precisamente hacer efectivo el derecho al que antes me refería, porque lo que no se ve ni existe ni se combate. Y tampoco ayuda a las mujeres que a día de hoy sufren esta violencia y tratan de recuperarse de los efectos de la misma, dentro o fuera de un recurso de acogida”.

Después, la consejera ha expuesto que esta decisión choca contra las legislaciones vigentes: “El cambio de denominación choca con el fin previsto en la Orden 197/2022, de 4 de octubre, de la Consejería de Igualdad, por la que se establecen las bases reguladoras de las subvenciones para la gestión del funcionamiento de los centros de la mujer y los recursos de acogida para las víctimas de violencia de género en Castilla-La Mancha”. “La financiación con la que cuenta este centro se concede por ser un espacio específico para atender a víctimas de la violencia machista y no a otro tipo de personas”, ha remarcado.

Es por todo ello por lo que Sara Simón le pide al nuevo equipo de gobierno “que reconsidere la decisión”. “Que se mantenga la denominación ‘Casa de Acogida de Víctimas de Violencia de Género’, no poniendo en peligro así la financiación concedida por el Gobierno de Castilla-La Mancha, sujeta por otro lado a fondos europeos con carácter finalista”, insiste.

Este centro, pionero en Castilla-La Mancha, sirve de refugio para las víctimas de violencia de género, ya que atiende a estas víctimas de manera integral gracias al trabajo de las profesionales especializadas en violencia de género que trabajan en él. Así, ha atendido a más de 2.000 personas, de las que más de 900 son mujeres y más de 1.100 menores.

Fue hace unos días cuando el PSOE lamentó que el PP, con sus cesiones a la ultraderecha por los pactos que ha sellado con Vox para llegar a los gobiernos, haya “roto el consenso” en torno a las áreas de violencia de género, despoblación y memoria democrática, a las que nunca se habían opuesto mientras gobernaban los socialistas, que han estado al frente de la institución prácticamente durante 40 años.