Una semana después de que ElPlural.com adelantara en exclusiva los chats de la ‘UCO patriótica’, su excapitán, Juan Vicente Bonilla, ha roto su silencio. Lo ha hecho ante las cámaras de El Programa de Ana Rosa de Telecinco, desde donde no sólo ha justificado palabras altisonantes como “matar rojomorados”, sino que además ha salvado a Isabel Díaz Ayuso al explicar que él no ha mantenido ningún trato con la presidenta de la Comunidad de Madrid, sino que es la Consejería de Sanidad de su gobierno la que le contrata como gerente de Seguridad del Servicio Madrileño de Salud.
A su llegada al plató del espacio de Telecinco, el capitán Bonilla se ha presentado como víctima de una campaña del Gobierno. “Yo creo que aquí soy un instrumento para desacreditar el trabajo de la UCO y a través de mí están atacando a la UCO”, aseguró nada más comenzar la charla con Ana Rosa Quintana, sin mencionar en su arranque los mensajes desvelados por este periódico en los que se advertía, junto a su confidente, de que mataría a “los rojomorados”.
En este sentido, ha cargado directamente contra la vicepresidenta primera del Gobierno, María Jesús Montero, la ministra de Educación, Formación Profesional y Deportes, Pilar Alegría; el ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres; y el titular de Transformación Digital y secretario general del PSOE-M, Óscar López. El capitán Bonilla ha asegurado que todos los citados, miembros del Gabinete de Pedro Sánchez, le atribuyeron la “posibilidad de poner una bomba lapa en los bajos” del coche del presidente del Gobierno.
Bonilla se refirió también a la cita de “matar a los rojomorados”, algo que se puede comprobar perfectamente en los chats a los que accedió ElPlural.com. De hecho, en otro fragmento de las conversaciones con su confidente, el empresario J.L.C., dijo que al presidente del Gobierno había que “desterrarlo” o que a Pablo Iglesias, ex vicepresidente segundo del Ejecutivo y ex ministro de Asuntos Sociales y Agenda 2030, “había que mandarlo a Corea del Norte”.
Salva a su jefe
Actualmente, Bonilla ocupa el cargo de gerente de Seguridad del Servicio Madrileño de Salud (SERMAS), un puesto que aclaró no fue creado específicamente para él. "La ley exige que instituciones como el Servicio Madrileño de Salud, que gestiona 35 hospitales, cuenten con un responsable de seguridad corporativa", explicó. Aclaró que su nombramiento se debe a esta normativa y no a una vinculación personal o política con la presidenta Isabel Díaz Ayuso.
Bonilla también aprovechó la ocasión para desmentir cualquier relación cercana con la líder del PP madrileño, señalando que "no tengo ningún contacto directo con Ayuso. A mí me contrata la Consejería de Sanidad, no Sol". Su nombramiento, insistió, responde a razones estrictamente profesionales y legales, ajenas a cualquier influencia política.
En una entrevista anterior en el programa Todo es mentira de Cuatro, Bonilla explicó su relación con la fuente de información que le proporcionó más de 2.000 páginas de mensajes: "Hay que contextualizar las conversaciones. En todo momento, yo estaba hablando con una fuente. Mi trabajo era motivar a esa fuente, independientemente de su ideología, para obtener la información que buscaba". Afirmó que su papel no era otro que el de recabar datos relevantes para las investigaciones que llevaba a cabo en su función como miembro de la UCO.
En cuanto a su fichaje por la Comunidad de Madrid, Bonilla volvió a reiterar que su contratación nada tiene que ver con una colaboración con el Partido Popular. "Nunca he trabajado con el PP, ni Ayuso ni yo nos hemos visto nunca. Es completamente falso", concluyó, enfatizando que su relación con el Gobierno regional es exclusivamente profesional y ajustada a la ley.