La contestación de Bauzá, que ganó su puesto jurando a diestro y siniestro que llegaba para acabar con corruptelas y enchufismos -incluso firmó un documento en ese sentido- fue cuando menos imaginativa: "Me dedico en cuerpo y alma a mi trabajo como presidente del Govern y como diputado de esta Cámara, son las únicas actividades que ejerzo y, por tanto, las únicas que figuran en mi declaración". ¿Y sobre la farmacia? Tampoco estuvo mal lo que dijo: Se trata de "su patrimonio", y la tenía antes de ser President.

Decisión judicial sobre una consellera socialista...
El problema para Bauzá es que hay precedentes muy complicados para él. Incluido una decisión judicial sobre un caso simplemente idéntico, por una demanda que puso... ¡su propio partido en Baleares! Les contamos.

En 2001, 28 parlamentarios del PP plantearon un recurso contra Aína Salom, entonces consellera de Sanidad, porque era propietaria de una farmacia. El proceso acabó en la sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJB) que dictaminó que "doña Aina Salom ha ejercido el cargo de honorable consellera de Sanidad y Consumo a pesar de que esta actividad pública no es compatible con la propiedad de una farmacia abierta en la calle General Riera, 136, de Palma".

El grupo socialista intentó justificarse en que la consellera había traspasado la gestión de la farmacia a otra persona. El TSJB fue contundente en su respuesta: recordaron que la ley balear de Incompatibilidades precisamente impide "las actividades privadas de los cargos que pudieran comprometer o poner en entredicho su objetividad y plena imparcialidad a la hora de servir a los intereses generales", y que la garantía de imparcialidad no se resuelve con el simple traspaso de responsabilidades o titularidad, cuando el alto cargo sigue recibiendo beneficios económicos del negocio. Como era el caso de la consejera...., y como es el caso de Bauzá.

Ahora se espera que el mismo TSJB, ante el que se ha puesto una denuncia por parte de grupos de la oposición, dictamine en los próximos días sobre el caso de Bauzá.

... Aclaración del Gobierno Rajoy sobre un alto cargo popular
Pero hay más. Y quizás incluso políticamente más significativo. A raíz de esta situación 'anómala', un diputado del Partit Socialista de Mallorca logró que se preguntara en el Congreso de los Diputados al Gobierno central sobre un caso paralelo: el del delegado del Gobierno en Extremadura. El popular Alejandro Ramirez del Molino, tuvo que dejar el puesto por ser incompatible con poseer una farmacia. El Gobierno de Rajoy explicaba en su respuesta, con evidente 'satisfacción', que “por parte de la Oficina de Conflictos de Intereses no se llego a la emisión de ninguna resolución” porque no resultó necesario cuando Ramírez “manifestó en las declaraciones que dirigió a los registros de altos cargos con ocasión de su toma de posesión, que era titular de una farmacia, se le explico la normativa de incompatibilidades de altos cargos, según la cual la titularidad de una farmacia no era compatible con su cargo y, en consecuencia, dimitió". Es decir, o farmacia, o cargo..., y este hombre eligió farmacia.

Es ésta la disyuntiva que se resiste a afrontar el presidente balear, a pesar de los precedentes.... Y no es la única. El que se presentó como campeón anticorrupciones tiene abierta una investigación por parte de la fiscalía, como les contamos en ELPLURAL.COM, por el nombramiento para un alto cargo de la televisión autonómica de un empresario al que pretendía vender otro de sus negocios familiares, una vinoteca.