La presidenta del Congreso, la socialista Meritxell Batet, ha subrayado que la Constución de 1978 no ser "bandera" de ningún partido pues la Carta Magna ampara proyectos "opuestos" entre sí, y ha querido dejar claro que todas las formaciones tienen "plena legitimidad" para participar en la actividad política y que no se debe "considerar enemigo" a los adversarios.

En su discurso del acto central del Día de la Constitución, Batet ha señalado que la fuerza de la Carta Magna radica en su "programa de convivencia", ya que en su marco hay "un amplio margen para desarrollar proyectos políticos distintos y hasta opuestos". Debe valorarse el conjunto, el acuerdo global, y no cabe desprenderse de los contenidos que resulten molestos, ni incorporar coeficientes reductores.

Y ha remarcado que los partidos no terminan su función en las elecciones, sino que son "herramientas" para llegara acuerdos". "En las cámaras están presentes distintas opciones políticas y ninguna de ellas merece la descalificación -ha señalado-. La democracia exige aceptar al otro, someter a crítica sus razones y aceptar su plena y legitima participación".

Por ese motivo, ha afirmado que los partidos "no existen solo como instrumentos de la lucha electoral", sino que son también "herramientas de la actuación institucional para favorecer el diálogo plural y el acuerdo". En esta línea, la presidenta del Congreso ha recordado los trabajos de la comisión de reconstrucción y ha pedido voluntad política para que dichos acuerdos fructifiquen.

En este sentido, la presidenta del Congreso ha reclamado un "patriotismo enrraizado en la fraternidad y en los vínculos humanos". "Hace unas semanas, el rey Felipe VI nos convocó a un esfuerzo colectivo de concordia y entendimiento. Mirar al futuro, a los retos, es hoy más necesario que nunca. Lo que nos une no es lo que ocurrió en el pasado, aunque tenga influencia sobre el presente".

Batet también ha tenido palabras de reconocimiento del trabajo de los profesionales sanitarios, las organizaciones no gubernamentales y las Fuerzas de Seguridad en la lucha contra la pandemia del coronavirus.

"Gracias a todos por tanto trabajo, gracias por ir más allá de lo que exige la profesionalidad, por la compañía y las palabras de consuelo, por las manos apretadas y las caricias repartidas, por haber hecho todo lo posible para reconfortar a los que hemos tenido cerca la enfermedad. Gracias por todos los esfuerzos entregados", ha asegurado.

Al final de su discurso, Batet ha citado a Ortega y Gasset para señalar que "España necesita de todas las colaboraciones, las mayores y las ínfimas, porque necesita -queráis o no- hacer las cosas bien, y para eso todos somos pocos".