Isabel Díaz Ayuso, la presidenta de la Comunidad de Madrid, se ha erigido en la heroína de la Navidad, al exponer una cruzada para defender lo que considera la festividad más "atacada" de todos los tiempos. En el discurso inaugural del belén instalado en la Real Casa de Correos, Ayuso aprovechó la ocasión para lanzar una arenga de tintes casi épicos: “Cada vez se lee y se oye menos la palabra Navidad, cada vez se la llama menos por su nombre”. Para la mandataria, esta aparente desaparición de la Navidad no es solo una cuestión semántica, sino un verdadero asalto a la esencia de la fiesta.
“No dejemos que nos la censuren, nos la quiten. Los que la odian, ellos sabrán por qué, van contra todo lo inocente y todo lo bonito de este mundo”, ha exclamado, dejando claro que, según su visión, hay fuerzas oscuras que conspiran contra el espíritu navideño. En su mundo de lucha y resistencia, la Navidad se ha convertido en una especie de bastión cultural y cristiano que ella está dispuesta a defender, cueste lo que cueste.
Pero Ayuso no se quedó ahí. En una declaración que podría haber salido de un guion de película de acción de Scorsese, comparó la omisión de la figura de Cristo en los discursos actuales con un atentado histórico. “Incluso se está dejando de contar los años desde el nacimiento de Cristo. O, más bien, se cuenta desde su nacimiento, pero se omite a Cristo, se hace como si no existiera”, ha lamentado, como si el olvido del Niño Jesús fuera una conspiración global orquestada para socavar las raíces cristianas de la sociedad española.
“Es una doble traición a la Historia y a quiénes somos”, ha sentenciado, posicionándose a sí misma como la guardiana de la herencia de la Cristiandad. "Le roban la herencia de la cristiandad y no falla el odio al cristianismo dentro del propio mundo cristiano, que no tiene nada que ver con la falta de fe, va siempre acompañado del desprecio al hombre que es el desprecio a la persona libre, única, insustituible, digna, con la excusa de cualquier determinismo, de la negación de la libertad de cualquier", ha trasladado.
Ayuso, la heroína de la derecha
Este fervoroso discurso no es un episodio aislado, sino que refleja la creciente figura de Ayuso dentro de la derecha española, donde ha logrado distanciarse de figuras como Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, para convertirse en la figura más prominente de ese espectro político. A través de su discurso radical y polémico, Ayuso ha logrado atraer a una parte significativa de la extrema derecha, convirtiéndose en su emblema. En este sentido, su imagen como "defensora" de los valores tradicionales y de la familia ha resonado profundamente entre aquellos que se sienten cada vez más alejados de los moderados del Partido Popular.
Detrás de su éxito se encuentra la figura de Miguel Ángel Rodríguez, su director de comunicación, conocido por su estilo combativo y directo. Rodríguez ha jugado un papel crucial en la construcción de la imagen de Ayuso como una figura polarizadora que no tiene miedo de desafiar al establishment, incluso a los miembros más moderados de su propio partido. La estrategia de comunicación de Ayuso, impulsada por Rodríguez, ha logrado que la presidenta madrileña eclipsara a Feijóo, quien ha quedado en un segundo plano en muchas de las luchas políticas actuales, especialmente en la oposición al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
En este escenario, Ayuso ha conseguido consolidarse como la líder de una derecha desafiante, presentándose como la principal voz crítica del Gobierno de Sánchez, mientras que Feijóo se ve cada vez más arrinconado en la batalla por el liderazgo de la derecha. Su constante ataque a la "izquierda radical" y su defensa de lo que considera las "tradiciones españolas" le ha otorgado un protagonismo que, por ahora, parece haber eclipsado a sus rivales dentro de su propio partido, haciendo de ella no solo una presidenta regional influyente, sino la principal opositora a la Moncloa.