La reforma de la ley de Seguridad Ciudadana, más conocida como Mordaza, sigue sin acuerdo, pero avanza al siguiente estadio. Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) ha facilitado con su firma que la ponencia tenga un informe que elevar a la comisión de Interior, que deberá aprobar el dictamen definitivo para que el Congreso lo debata y vote. El Grupo Republicano ha sumado fuerzas con PSOE, Unidas Podemos y PNV, aunque ha advertido que se trata de un gesto para mantener la negociación y que no se han movido del ‘no’.

La ponencia se ha reunido hoy a las 12:00 horas y el horizonte no podía pintar más aciago. La coalición y los socios del Ejecutivo ya asumían que la reforma de Mordaza, uno de los principales compromisos del bloque de investidura, podría decaer. Las discrepancias en cuatro artículos concretos imposibilitaban el entendimiento. El PSOE no estaba por la labor de modificarlos y EH Bildu y ERC no reculaban. Según han explicado los portavoces al término de la reunión, el acuerdo para cerrar la ponencia se ha alcanzado por 19 votos a favor contra 17 en contra, siendo determinante el 'sí' de ERC. El Grupo Republicano ha cedido in extremis, dando la victoria a los socialistas en este particular chicken game. Los hechos invitan a pensar que su cambio de parecer es la moneda de pago por el acuerdo entre Govern y PSC por los Presupuestos para la Generalitat tras tres meses de negociación.

El otro socio habitual, Bildu, se ha enroncado en el ‘no’. “En la Ponencia de hoy se ha vuelto a constatar que no hay acuerdo en los artículos más lesivos de la Ley Mordaza por los que más se sanciona. Que pase de ponencia a comisión no significa nada sobre el fondo”, ha explicado el diputado Jon Inarritu, quien ha insistido en que no se ha desencallado nada: “Estos debates los tendremos a partir de ahora en comisión, pero el bloqueo, lamentablemente, continúa. Espero que ahora en comisión la presión haga diamantes y se llegue a un consenso para desactivar los puntos más lesivos de la Ley Mordaza. De mantener el texto como está, seguiría manteniéndose una Ley Mordaza light, que EH Bildu no apoyará”.

Los cuatro puntos de fricción son el uso de las pelotas de goma, las faltas de respeto a la autoridad, la desobediencia y las devoluciones en caliente. Para esquivar el bloqueo, los socialistas han planteado abordar el asunto de las pelotas de goma en el articulado que regula las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y no en Mordaza. Asimismo, apuestan por dejar al margen la disposición adicional que recoge un régimen especial para Ceuta y Melilla por el cual “los extranjeros” detectados en la línea fronteriza que tratan de “superar los elementos de contención fronterizo” pueden “ser rechazados” a fin de “impedir su entrada ilegal en España". El PSOE esperaba que los socios aceptaran tratar este punto en la Ley de Extranjería para extirparla del debate, pero tanto ERC como Bildu se niegan porque no hay visos de ser modificada en lo que resta de legislatura.

“No nos engañemos, el PSOE quiere mantener los puntos más lesivos de la ley Mordaza dando un margen de interpretación amplia a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado” ha lamentado el diputado abertzale. Bildu insiste en que el riesgo de que el texto decaiga en comisión es real. También ha apuntado que esperaban seguir negociando en ponencia para, poco a poco, cerrar acuerdos, porque “de no modificarse estos artículos, estaremos ante una Mordaza bis y nosotros nos comprometimos a derogarla”.

De igual forma, María Dantas, de ERC, ha advertido que “todavía nuestro voto es ‘no’ al texto como ha quedado hasta ahora, pero no queremos levantarnos de la mesa, queremos seguir dialogando y que haya movimiento, sobre todo del PSOE, en los principales escollos”.

Enrique Santiago, de Unidas Podemos, ha celebrado que se haya cerrado la ponencia y la comisión tenga ya un informe con el que debatir; aunque no ha escondido las “discrepancias que quedan, que son importantes”. Santiago ha defendido que el texto no tiene nada que ver con la ley aprobada por el Gobierno de Mariano Rajoy y, asumiendo que queda mucho trabajo por delante, espera que los avances no decaigan, porque “sería muy triste”.

El líder de Más País, Íñigo Errejón, ha adelantado que si la reforma de Mordaza no es mucho más ambiciosa, que no cuenten con sus votos. “Mordaza fue un brutal retroceso en derechos. Rajoy, en lugar de combatir la pobreza, combatió a los pobres. Hay que derogarla entera. Las mordazas no se quitan por partes. O se quitan o no”, ha sentenciado, instando a Moncloa a tomarse “en serio su promesa”, pues “dijo que iban a derogar la Mordaza y tienen que derogarla”.