¿Quién es el director general de la Policía?
Este domingo, sin embargo, La Gaceta ha apuntado a la cabeza del actual ministerio del Interior, al jefe de Gabinete del director de la Policía, Ignacio Cosidó, uno de los artífices de la "limpieza ideológica" que se está llevando a cabo en Interior, como anticipó ELPLURAL.COM. También apunta a él el diario El País. ¿Pero quién es Cosidó? Un político con ideas radicales, ultracatólico, convencido defensor de la guerra de Irak, que calificó de “necesaria, justa y legítima”; admirador de José María Aznar, en la órbita de FAES a través del Grupo de Estudios Estratégicos (GEES). Durante el anterior Gobierno del PP ejerció un alto cargo en la Dirección General de la Guardia Civil y cuando el PP perdió las elecciones en 2004 radicalizó aún más su discurso, del que ha dejado constancia en sus colaboraciones en Libertad Digital, el diario de Federico Jiménez Losantos.
Su obsesión con Rubalcaba
Alfredo Pérez Rubalcaba ha sido desde hace años uno de sus blancos favoritos, al que ha acusado de llegar al ministerio del Interior gracias a su “connivencia de ETA o de una parte de ETA”. En octubre de 2010, Cosidó se refirió al actual líder de los socialistas como “el prototipo de político sin principios y sin escrúpulos que ha hecho de la conquista del poder y su conservación el único objetivo de su interminable carrera política. Lo peor es que tener a un político de esta naturaleza en el Ministerio del Interior es un verdadero riesgo para nuestra libertad (…) Su extinción política, que estoy convencido está próxima, será una excelente noticia para la libertad”, afirmó.
En las marchas contra Zapatero y Rubalcaba
Como Jaime Mayor Oreja, Cosidó estuvo en muchas de las manifestaciones contra la política antiterrorista de Zapatero en las que se llamaba a viva voz “asesinos” tanto al expresidente del Gobierno como a Rubalcaba. En sus artículos en Libertad Digital, el actual director de la Policía afirmó que Zapatero había llegado al Gobierno “por la fuerza del azar” y que durante sus mandatos había “abandonado el campo de los que mueren para ir a hablar con los que matan”. En abril de 2005, escribió sobre el político socialista: “La fórmula de este aprendiz de brujo es una gran pócima de socialismo, un poco de comunismo y grandes dosis de nacionalismo radical que condene al PP a un aislamiento eterno”.
Ultracatólico
La misma radicalidad ha manifestado el director general de la Policía sobre la religión católica, que según ha señalado en uno de sus artículos “parte de una defensa radical de la libertad del ser humano, porque estamos hechos a imagen de Dios; de la igualdad, porque todos somos hijos de Dios; y de la dignidad, que emana del amor de Dios a cada vida humana”. En sus escritos, que rozan el fanatismo, Cosidó ha advertido de que “hay quienes quieren desterrar a Dios de Europa” e “imponer un relativismo absoluto”.
Su fanatismo
En abril de 2005, Cosidó apuntó: “España el país en el que la Iglesia Católica corre el mayor riesgo de quedar marginada a una secta semiclandestina. Así, en laicismo militante de una parte de la izquierda política amenaza con transformase en una política antirreligiosa en la que se borre toda manifestación espiritual de nuestra vida pública y muy en especial se margine la enseñanza de la religión en las escuelas. Por otro lado, existe una ofensiva en materias como el matrimonio homosexual, el aborto, la manipulación de embriones o el incipiente debate sobre la eutanasia que atentan contra los principios morales más básicos”.
Sus polémicas declaraciones sobre los estudiantes valencianos
Durante las recientes manifestaciones en Valencia contra los recortes en Educación, cuando la policía cargó contra los estudiantes, Cosidó justificó tal actuación afirmando que “estaba obligada a intervenir” para hacer frente a los “elementos violentos”.
