La crisis que a nivel nacional sufre la formación de Albert Rivera se ha manifestado con toda crudeza y gravedad en Málaga. Razones no le faltan a un sector crítico amplio y representativo de la provincia pues en esta circunscripción los resultados de las elecciones municipales han sido nefastos sin paliativos. Hasta un 72 por ciento se ha visto reducidos los porcentajes de voto al partido naranja que de los 108 municipios solo gobierna ahora en un pequeño municipio de 2.000 habitantes tras fichar previamente al alcalde del PP y pasarlo a sus filas.

Esta semana, en el centro histórico de la capital, medio centenar de responsables locales de la provincia y ex cargos públicos hicieron público su rechazo a la forma de gestionar el partido con duras y muy severas críticas a los paupérrimos resultados. La denominada Plataforma por la Regeneración de Cs Málaga no dejó títere con cabeza desde los dirigentes provinciales hasta la dirección nacional.

Falta de democracia interna


Los asistentes hicieron público un manifiesto por la regeneración del partido y se mostraron muy críticos con la dirección provincial, en especial, contra el secretario de Organización, Vicente Sánchez, su homóloga de Institucional, Teresa Pardo (que acumula cinco cargos) y contra el diputado Guillermo Díaz así como  contra cargos intermedios a los que culpan de la falta de democracia interna, del fracaso electoral y de la imposición de candidatos así como de la elaboración de listas municipales que supusieron un fracaso.

Manifiesto


El manifiesto ya ha sido firmado por unas 275 personas y está rubricado por militantes destacados el actual portavoz en funciones de Ciudadanos en la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental, Ignacio Rivas, el es coordinador del partido naranja en Marbella Francisco Gómez Palma, su homólogo en Coín, Guillermo Álvarez o Miguel Ángel Macías, que disputó las primarias para encabezar la candidatura al Congreso en las generales.

Según publica la revista Lugar de Encuentro,  Macías y Rivas fueron los encargados de leer el texto ante numerosos afiliados provenientes de diferentes municipios y donde se vio a exmilitantes como el abogado José Agustín Gómez-Raggio o al que fuera edil en Torremolinos Antonio Linde.


Hervias pasa de los críticos


Los promotores del documento  se presentan como políticos “de centro”, defienden que el manifiesto tiene una vocación “constructiva”, que “no va contra el partido” y que recurrieron a la presentación pública después de que se mandara al secretario de Organización nacional, Fran Hervías, para que actuara y no haberlo hecho. Asimismo, pidieron la dimisión de Pardo y Sánchez por la “nefasta” gestión de los últimos meses y que, a su juicio está detrás de los “malos” resultados de las últimas elecciones y la convocatoria de una asamblea extraordinaria nacional “donde se vuelva a la senda democrática interna del partido”.


Políticos “profesionales


El documento, donde los firmantes se presentan como gente que “vivimos la política y no vivimos de la política, políticos de vocación y convicción y no políticos de profesión”, defiende una vuelta de Ciudadanos a sus principios originarios como el de una persona, un cargo y donde se premie el mérito y la capacidad; aboga por recuperar valores como la transparencia; denuncia que la dirección provincial ha desatendido a sus bases y sus cargos públicos porque «no hay una gestión de recursos humanos como tal”; critica que el partido a nivel nacional se haya convertido en “poco democrático”; y advierte de que la deriva de la formación naranja les puede abocar a la desaparición como le sucedió a UPyD.


La búsqueda de talento que dice Albert Rivera es “mentira”
El documento sostiene que la dirección provincial “no ha hecho autocrítica” tras los resultados de las últimas citas electorales; critica el proceso de elaboración de listas por no haber tenido en cuenta las capacidades y méritos de los militantes sino las afinidades e intereses personales por lo que la búsqueda de talento que pregona Albert Rivera en Málaga es “mentira”; denuncia que se ha realizado “una auténtica caza de brujas, eliminando aquellas personas que de una u otra manera no eran de su agrado”; y sostiene que no se han realizado asambleas provinciales ni comarcales como establecen los estatutos, que no ha habido formación en materia de programas electorales y que han contado con medios “irrisorios”.


Mentiras y mediocridad


“Basta ya de mentiras, de poca seriedad, no queremos personas que en la organización sólo miren su ombligo ni otras que por su nula aptitud y actitud están incapacitadas para ostentar ningún cargo de responsabilidad. (...) Pedimos que Ciudadanos sea el partido que siempre fue y en el que todos creímos y con el que soñamos y nos ilusionamos y no en lo que se está convirtiendo actualmente: un partido poco democrático, donde prima la mediocridad en contra del talento, que se desangra día a día, donde las actuaciones personales y sectarias se imponen a las honestas y objetivos, donde no hay gestión alguna de nuestro capital humano y donde sus cargos intermedios carecen de capacitación para desarrollar este trabajo de responsabilidades como ocurre en Málaga.


Dedazos


Según los convocantes en Málaga "los cargos de Ciudadanos se ponen a dedo" por lo que se están produciendo la baja de muchos afiliados y han avisado de que están surgiendo más movimientos críticos en Sevilla, La Coruña y Canarias.