El secretario de Justicia del PP, diputado nacional y exministro de Justicia, manifestó esta semana que la exsecretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha protagonizado un "ejercicio de generosidad" al renunciar a su escaño. Rafael Catalá defendió que no ha sido "demostrada ninguna actividad ilegal" durante su labor en dicho cargo y aseguró que ella sólo intentó "tener información de si se estaban produciendo algunas actuaciones irregulares". Por ello expresó su "sensación de tristeza", porque el PP "pierde a una extraordinaria dirigente".

Rafael Catalá partició el jueves en Sevilla en un encuentro con colectivos del ámbito de la justicia, junto al exministro de Interior, exalcalde hispalense y cabeza de lista del PP de Sevilla a las elecciones al Parlamento andaluz, Juan Ignacio Zoido. En ese contexto, y en declaraciones a los medios de comunicación, evaluó la decisión de María Dolores de Cospedal de renunciar a su escaño en el Congreso tras la polémica por las grabaciones del excomisario José Manuel Villarejo difundidas por el portal digital Moncloa.com.

Tras la renuncia de Cospedal y la negación de la misma respecto a que encargase investigar al histórico dirigente del PP Javier Arenas, actualmente vicesecretario nacional del partido, o al hermano del exvicepresidente del Gobierno y exministro socialista Alfredo Pérez Rubalcaba, Catalá expresó que no le consta que se investigase a Arenas pero, sobre todo, recalcó su "sensación de tristeza".

"Filtraciones permanentes"

Y es que según defendió, Cospedal "se ha dedicado en cuerpo y alma al servicio público y al PP", en una "larguísima trayectoria" política en la que ha "asumido responsabilidades públicas desde muy joven", ostentando diferentes cargos como presidenta de Castilla-La Mancha, la cartera del Ministerio de Defensa o la Secretaría General del PP. Ahora abandona su escaño, dijo, "en una situación en la que permanentemente se están filtrando informaciones sobre grabaciones realizadas" por Villarejo. Catalá manifestó "sorpresa" por el hecho de que se filtren "sólo asuntos de Cospedal". "Parece que hay un interés especial en perjudicar su buena reputación", aseveró. 

Todo ello, cuando a su juicio, como secretaria general del PP "hizo lo que tenía que hacer", es decir "velar por el interés general del PP" e intentar "tener información de si se estaban produciendo algunas actuaciones irregulares". En este sentido, insistió en que no cree que fuese acometida ninguna investigación sobre Javier Arenas, sobre todo porque se trata de una personas dedicada también "al servicio público y a la política con mayúsculas", con lo que no se imagina "que Arenas tenga nada para ser investigado". Simplemente, defendió, "había una fundación en la que ella pidió que se le aclarase información", en relación a la Fundación de Estudios Europeos.

Catalá lamentó que el PP "pierda a una extraordinaria dirigente" que, a su juicio, "ha hecho un ejercicio de generosidad" al renunciar a su escaño. "Me apena. No puede ser que los mejores acaben teniendo esta crítica por una actuación sobre la que no se ha demostrado ninguna actividad ilegal", aseveró, considerando que "todos los españoles de bien deberían reconocer a Cospedal sus años de servicio" al interés general.