La militancia de Podemos ha escogido a Ione Belarra como la nueva secretaria general con un apoyo del 88,69% de los votos en la cuarta Asamblea Ciudadana que se ha celebrado en el Auditorio Paco de Lucía de Alcorcón.

Un acto en el que algunos de los interventores no han podido evitar acordarse del exdirigente de Podemos, Pablo Iglesias, tras su retirada de la política después de los resultados electorales del 4 de mayo.

Las bases de la formación han apostado por el nuevo liderazgo de Belarra para tratar de abrir una nueva etapa de la formación tras la desaparición de su antiguo líder.

El ministro de Consumo, Alberto Garzón, ha recordado el importante reto que afrontó Iglesias al fundar Podemos y cada vez que el auditorio escuchaba el nombre del exvicepresidente segundo del Gobierno, se coordinaba al unísono para recalcar el mensaje que ha marcado su carrera política: “Sí, se puede”.

Unas palabras parecidas a las que Belarra ha ofrecido durante su intervención como nueva secretaria general del partido: "Gracias por enseñarnos que un militante tiene que estar ahí donde es más útil, gracias por lo que has hecho por este espacio político, pero sobre todo por el país. Ten seguro que seguiremos aquí".

"Me voy a dejar la piel”

La reminiscencia sobre Iglesias ha quedado eclipsada tras conocer que 45.753 militantes de Podemos habían apoyado con un 88,69% de los votos la candidatura de Ione Belarra.

A la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, rodeada por todos los miembros de su lista, no le ha temblado la voz y al igual que ha cargado contra la extrema derecha y ha defendido su objetivo de fortalecer la mayoría progresista en España, ha mostrado su disposición ante los militantes: “Me voy a dejar la piel para llevar este proyecto lo más lejos posible”.

 "Si hay algo que define Podemos es la inauguración de una nueva forma de hacer política que elige siempre el camino correcto, aunque no sea el camino sencillo", ha defendido.

"Es imposible que Casado tape la corrupción de su partido"

Belarra ha tardado poco en cargar contra la derecha española y, aprovechando la manifestación convocada por Vox, Ciudadanos y el Partido Popular en la plaza de Colón, ha mandado su primer mensaje crítico contra Pablo Casado como dirigente de Podemos.

La ministra de Derechos Sociales ha justificado que “España no se merece a una oposición petrificada en la foto en blanco y negro de Colón" y ha criticado que el presidente popular trate de tapar la corrupción que ha habido en su partido.

“Es imposible que Pablo Casado pueda tapar la corrupción de su partido, por muy grande que sea la bandera. Él dirige una formación política que ha actuado como una organización criminal y ahora está tratando de extender el odio por toda España”, ha señalado.