Ahora que llega el otoño y los domingos se hacen más caseros, consultar la página web del Congreso de los Diputados (congreso.es) se puede convertir en divertimento familiar y en un juego de Monopoly, donde las posesiones inmobiliarias son la nota dominante de las rentas y bienes patrimoniales de sus señorías, pero también sirve para agudizar el ingenio y descifrar las incongruencias y singularidades de las declaraciones de nuestros representantes.

Del negocio redondo de Pocoyó…
Decimos esto porque para la mayoría de los ciudadanos es difícil entender que el diputado del PP por Toledo, Alejandro Ballestero, propietario de 560.000 euros en acciones de Zinkia (empresa que gestiona los dibujos Pocoyó) y de otros 90.000 en varias participaciones, le salga . Pero no solo eso, este joven diputado, que cuestionó el liderazgo de Mariano Rajoy, es propietario de un piso en Madrid, de otro en Estepona y de una plaza de garaje en la misma localidad andaluza, pero Hacienda le “perdona” la vida.

…A la indigencia residencial de Pons
También es difícil de asumir que un diputado que gana todos los años algo más de 75.000 euros, más las aportaciones del PP, como es el caso del polémico portavoz Esteban González Pons, no sea propietario de ninguna vivienda (ni casa, ni apartamento), convirtiéndose así en el único diputado que no posee cuatro paredes, aunque sean hipotecadas. Tal vez por eso el parlamentario valenciano tiene en su cuenta corriente una cantidad igual a su sueldo íntegro anual.

“Inmobiliaria Carrera de San Jerónimo”
Y llama la atención la situación de Pons porque la mayoría, por no decir la totalidad, salvo el mencionado, es propietario de una media de tres viviendas por diputado, si bien es cierto que en la Carrera de San Jerónimo brillan con luz propia “los ladrillos” del diputado del PP por Segovia, Francisco Javier Gómez, dueño y señor de nada más y nada menos que de 18 viviendas y 2,5 millones de euros en capital e inversiones. Sin embargo, solo pagó de IRPF 16.197 euros.

Extrañas propiedades
El juego del Monopoly del Congreso nos depara muchas más sorpresas inmobiliarias. Tal vez, las más curiosas sean las propiedades declaradas por Arturo García-Tizón (PP) y Francisco Jorquera (BNG). Mientras que el también presidente de la Diputación de Toledo y diputado por la misma provincia, García-Tizón, declara ser propietario de un balcón en Chinchón (además de otras ocho propiedades entre viviendas y fincas), el gallego Jorquera dice tener dos viviendas y un garaje, aunque no tiene coche. Pero para eso está Miguel Arias Cañete, que declara poseer hasta 8 vehículos, algunas marcas quitan el hipo a los amantes del motor.

El retrato del IRPF
Pero Jorquera no es la única de sus señorías que no tiene utilitario. Tampoco Mariano Rajoy, que gana menos en el PP (adelantado por EL PLURAL.COM) que su secretaria general, María Dolores Cospedal, tiene vehículo que declarar, aunque, eso sí, se convierte en uno de los diputados que más paga a Hacienda. Un total de 87.651 euros desembolsó el presidente “popular” a las arcas del Estado, seguido por José Bono (86.000) y por Arias Cañete (75.029). Por algo será.