El presidente del Gobierno está muy ocupado, tanto que desde agosto no encuentra una fecha en su agenda para inaugurar un tramo de 22,5 kilómetros de la autovía A-40, que podría estar operativo desde el pasado verano y que une Torrijos con la capital de Toledo, ciudad que soporta importantes atascos porque a María Dolores Cospedal se le ha antojado que Mariano Rajoy corte la cinta de una infraestructura proyectada, financiada y ejecutada por el Gobierno de Rodríguez Zapatero.
Rajoy se comprometió hace seis meses
Mariano Rajoy se comprometió el 17 de abril de este año con la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, a la que recibió en La Moncloa, a inaugurar antes de que finalice 2012 el citado tramo. Han pasado seis meses desde ese compromiso y casi dos desde que esos 22,5 kilómetros estén acabados, operativos y observados todos los días por los conductores de los 30.000 vehículos que absorbería la autovía de estar abierta al tráfico rodado.
Las obras están finalizadas
Así las cosas, el 29 de agosto, el servil delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Jesús Labrador, anunciaba ante los periodistas a bombo y platillo que las obras “están prácticamente finalizadas”, aunque precisaba que no podía “indicar una fecha concreta” para su inauguración, para seguidamente acusar al Ayuntamiento de Toledo de no aportar “nada”, como si los consistorios tuvieran competencias en materia de infraestructuras estatales, que ni siquiera los gobierno autonómicos poseen.
“Hoy mismo se puede abrir”
Tanto es así, que fuentes de Isolux-Corsan consultadas por ELPLURAL.COM, empresa encargada de su ejecución, señalan con rotundidad que el “tramo está acabado desde hace semanas y puede abrirse al tráfico rodado desde ya; desde ahora mismo”. Al ser preguntados por qué no está ya operativo, se han limitado a precisar que: “No nos corresponde a nosotros marcar los tiempos políticos; nuestro trabajo está acabado”. Ahora solo les resta cobrar los 59 millones de euros que les debe el Gobierno del PP.
Ana Pastor no se demoró
En este sentido, llama la atención que mientras Rajoy lleva semanas cuadrando el sudoku de su agenda para inaugurar el ramal de Torrijos-Toledo, la ministra de Fomento, Ana Pastor, urgió el pasado mes de junio a Cospedal para abrir al tráfico el tramo entre Santa Cruz de la Zarza y Villarrubia de Santiago de la misma A-40, a pesar de que el PP castellano-manchego también intentó demorar su apertura porque no le gustaba el jueves, 28 de junio, onomástica de San Ireneo, como fecha de inauguración.
Rajoy se comprometió hace seis meses
Mariano Rajoy se comprometió el 17 de abril de este año con la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, a la que recibió en La Moncloa, a inaugurar antes de que finalice 2012 el citado tramo. Han pasado seis meses desde ese compromiso y casi dos desde que esos 22,5 kilómetros estén acabados, operativos y observados todos los días por los conductores de los 30.000 vehículos que absorbería la autovía de estar abierta al tráfico rodado.
Las obras están finalizadas
Así las cosas, el 29 de agosto, el servil delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Jesús Labrador, anunciaba ante los periodistas a bombo y platillo que las obras “están prácticamente finalizadas”, aunque precisaba que no podía “indicar una fecha concreta” para su inauguración, para seguidamente acusar al Ayuntamiento de Toledo de no aportar “nada”, como si los consistorios tuvieran competencias en materia de infraestructuras estatales, que ni siquiera los gobierno autonómicos poseen.
“Hoy mismo se puede abrir”
Tanto es así, que fuentes de Isolux-Corsan consultadas por ELPLURAL.COM, empresa encargada de su ejecución, señalan con rotundidad que el “tramo está acabado desde hace semanas y puede abrirse al tráfico rodado desde ya; desde ahora mismo”. Al ser preguntados por qué no está ya operativo, se han limitado a precisar que: “No nos corresponde a nosotros marcar los tiempos políticos; nuestro trabajo está acabado”. Ahora solo les resta cobrar los 59 millones de euros que les debe el Gobierno del PP.
Ana Pastor no se demoró
En este sentido, llama la atención que mientras Rajoy lleva semanas cuadrando el sudoku de su agenda para inaugurar el ramal de Torrijos-Toledo, la ministra de Fomento, Ana Pastor, urgió el pasado mes de junio a Cospedal para abrir al tráfico el tramo entre Santa Cruz de la Zarza y Villarrubia de Santiago de la misma A-40, a pesar de que el PP castellano-manchego también intentó demorar su apertura porque no le gustaba el jueves, 28 de junio, onomástica de San Ireneo, como fecha de inauguración.