Soraya Sáenz de Santamaría ha conseguido que nadie le haga sombra ni contrapoder en el complejo de La Moncloa. La Vicepresidenta y el director (ya ex) del gabinete del Presidente del Gobierno, Jorge Moragas, comenzaron a chocar nada más instalarse en los despachos del Gobierno. El enfrentamiento ha ido a más, hasta el punto de que fuentes del PP ha señalado a ElPlural.com que "no se soportan" y que la guerra entre ellos ya era "total".

Como suele ocurrir en estos casos, la salida de Jorge Moragas, la sombra de Rajoy desde 2008, se vende como voluntaria y por motivos personales, como ganas de un cambio de vida en un destino más tranquilo. Pero detrás de todo ello es la guerra sin cuartel que ha mantenido con Sáenz de Santamaría. Moragas se va harto y cansado. Ha vencido la 'virreina de Cataluña' cuya gestión en la crisis catalana ha derivado en la peor crisis institucional del Estado español.

A Soraya sólo le queda un contrapoder en el Gobierno, María Dolores de Cospedal, ministra de Defensa que además en la número dos del PP.

Los diez negritos y el G7

A finales de diciembre de 2011 Rajoy configuró un Consejo de Ministros en la que se rodeó de amigos íntimos con los que había compartido vacaciones, fiestas y las penalidades de su travesía del desierto tras la segunda derrota ante Zapatero en 2008. A ese grupo de incondicionales la prensa denominó el "G-7" de Rajoy, aunque en realidad el núcleo de amigos era de seis y el G-7 oscilaba entre seis y ocho miembros. Se reunían a cenar y configuraron un núcleo de resistencia interna a Soraya Sáenz de Santamaría, que decidió ejercer su poder como "vice todo" de manera absoluta.

Estos son los ministros del denominado G-7 de Rajoy: Jorge Fernández Díaz, ex ministro de Interior, José Manuel Soria, ex ministro de Industria, José Manuel García Margallo, ex ministro de Exteriores, Ana Pastor, ex ministra de Fomento, Miguel Arias Cañete, ex ministro de Agricultura, y Jorge Morenés, ex ministro de Defensa. De todos ellos sólo Ana Pastor mantiene un puesto institucional con cierto poder, como es la Presidencia del Congreso de los Diputados. Cañete está en Bruselas como subcomisario y Morenés como embajador en Washington.

Los ex ministros Fernández Díaz, Soria y Margallo están profundamente dolidos con su salida del Gobierno, con las formas y cómo se les trató posteriormente.

 Al grupo del G-7 se incorporaron en su día el ministro de Justicia, Rafael Catalá, y la de Agricultura, Isabel García Tejerina, pero el grupo se disolvió cuando los seis del núcleo duro salieron del Gobierno.

Con la dimisión-huida de Moragas, Soraya Sáenz de Santamaría y Carmen Martínez de Castro (Secretaria de Estado de Comunicación) configuran el cinturón de hierro alrededor del Presidente del Gobierno. Sólo tienen un contrapoder, María Dolores de Cospedal, quien ha demostrado tener una capacidad de resistencia igual o superior a la de la Vice. Porque los del G-7 han ido cayendo como 'Los Diez negritos'......