Acabar con la altísima tasa de paro, evitar que unas casas fueran pasto de las llamas, salir de la crisis, hasta, incluso, conseguir salvaguardar la “unidad de España”. Estas son sólo algunas de las tareas que miembros del Partido Popular les han encargado a diferentes vírgenes, una labor que debería recaer sobre las manos de nuestros políticos pero que estos han preferido encomendarlo a lo divino.

El último en hacerlo ha sido el vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo Casado, que no ha dudado en reivindicar la figura de Santa Teresa para mantener la “unidad” de España.

Casado, como diputado por Ávila, participó el pasado domingo en la apertura del Año Jubilar Teresiano. Fue allí donde quiso recordar lo “patriota” que había sido durante su vida Teresa de Jesús, una mujer que "pensaba mucho" en estas tierras y que, teniendo en cuenta que estamos atravesando unos momentos “muy complicados” por el conflicto en Cataluña, hay que reivindicar su figura para guardar la “unidad” de España.

"Creo que, como decía ayer el obispo de Ávila, ese impulso de unidad en los escritos de la Santa nos ayude a reivindicarlos en unos momentos tan complicados a nivel político en España", dijo Casado

Ya de paso, recordó que Santa Teresa guarda una gran "riqueza espiritual" sin olvidar sus "dimensión turística" que han ayudado a convertir a Ávila en un "escaparate".

Pero Casado no ha sido el único que o bien ha encomendado el futuro de su persona y de su trabajo como representante público a una virgen o que ha decidido condecorarlas por su labor. Hacemos un repaso por los casos más llamativos.