"La gente entra con toda su mierda y todo su mundo hijo de puta, y tú se lo arrancas y lo tiras bien fuera. Luego, la gente sale a la calle y se tropieza con su mundo hijo de puta, y se lo mete en el bolsilllo. Pero se les ha quedado la lucecita de una sonrisa. Y, cuando menos se lo esperan, en mitad de su mundo hijo de puta, se le mete la luz, la sonrisa de este payaso que los devuelve a la vida". Luis Bermejo.

En una sociedad que sobrevalora el éxito, el payaso representa nuestro lado torpe, perdedor, fracasado. Es una reivindicación de la fragilidad, del derecho al asombro, a que nos superen las circunstancias. Es como para ponerse muy a su favor.

En el mes de septiembre, coincidirán en cartel del Teatro del Barrio varios espectáculos que comparten alma de clown, además de un altísimo y contrastado nivel artístico. Uno de ellos es El minuto del payasode Luis Bermejo, que estará en cartel  el 10 y el 11 de septiembre.

Este monólogo nos ubica en el día del Festival de Homenaje al Circo, una función benéfica en la que van pasando números circenses en un teatro, un payaso (Luis Bermejo) espera su turno en el foso. Van a hacer que salga al escenario por una trampilla. En la soledad de esta espera repasa y evoca momentos de su pasado donde nos confiesa la relación con su familia así como los hechos y personas que le marcaron en el circo donde nació. Además ha venido un productor de la tele que le va a proponer que vaya a la televisión a hacer su número, todos los días el mismo, a la una de la mañana, en un late show. Un minuto.