El maquillaje es uno de los artes de belleza que más amantes y haters levanta. Para algunas personas es una forma de expresión o un hobby, mientras para otras es innecesario. Sin embargo, lo que es indiscutible es que es un gran aliado cuando se trata de disimular imperfecciones o signos de cansancio, como ojeras o rojeces.
Eso sí, también puede llegar a ser tu peor enemigo si no lo sabes aplicar bien. Y es que los cosméticos pueden conseguir el efecto contrario al deseado, como marcarte más las arrugas, oscurecerte el rostro o, simplemente, ponerte unos cuantos años más de los que tienes encima.
Con todo, se trata de unos pequeños fallos que tienen fácil solución. Así, te explicamos los cinco errores de maquillaje que cometes y que te hacen mayor.
Los errores más frecuentes
Hay veces que, tanto en la vida en general como también en el maquillajes, menos es más. En este último caso, además, el exceso se muestra en un resultado poco favorecedor. Por eso, es importante tener en cuenta tanto cantidades de producto como tonalidades usadas.
- No hidratar la piel. Este es quizás el paso más importante a la hora de maquillarse y el que más gente se salta. La piel es el lienzo, por lo que tiene que estar limpio, sin impurezas externas y bien hidratado. Esto permite que el cosmético penetre bien y, sobre todo, que permanezca más tiempo en buenas condiciones. De no ser así, en lugar de camuflar tus imperfecciones, las resaltará más. También los labios deben estar hidratados para no tener grietas que estropeen tus labiales. Lo mejor es echarse diariamente vaselina o cacao para tenerlos siempre sanos y lo mejor posible.
- Tono de base de maquillaje incorrecto. El tono es fundamental. Aunque puedas pensar que usar una base de maquillaje con un color más oscuro al de tu piel te hará ver algo más morena, esto lo único que consigue es hacerte parecer más mayor. Y es que esta te ensombrecerá la cara y hará tus rasgos más duros. Lo mismo pasa si usas tonos por debajo. Se crea un efecto "tiza" que te hace ver pálida. Aunque a veces sea difícil, es recomendable buscar el tono más parecido al de tu piel para unificarla y que pase desapercibida.
- Labios perfilados con un tono oscuro. Pintarse los labios puede parecer muy sencillo pero cada vez es un arte más profesional. Y es que estos también puede hacerte ver mayor de lo que eres. El fallo está en usar un delineador mucho más oscuro que tu labial, lo que te puede recordar a los años 90. Para no repetirlo, es importante utilizar un lápiz del mismo color que tu labial. Si además rellenas el labio previamente con este lápiz esto hará que tu pintalabios luzca más y esté más tiempo intacto.
- No utilizar el corrector. No usar un corrector es ya un error. Además, no hacerlo y sustituirlo por el iluminador es peor aún ya que mientras el corrector disimula imperfecciones, el iluminador destaca e ilumina. Así, si te lo aplicas en la zona de las ojeras pensando que estas se disimularán, harás todo lo contrario: crearás el odioso efecto mapache.
- Abusar de sombras oscuras o brillantes. Tanto pasarte de sombra oscura como de brillos hará que tu rostro se vea mucho mayor. Hay que tener en cuenta que los tonos claros son los que agrandan la mirada, mientras los oscuros dan profundidad. Si quieres conseguir esto último, tienes que usar sombras de tonos oscuros solo en la parte más cercana a las pestañas y en la cuenca del ojo. En cuanto a las sombras brillantes, en gran cantidad, pueden desdibujar los contornos y hacer que la forma de tus ojos no quede definida. Por eso, los tonos claros -así como los gritter- irán en el centro del párpado y en el lagrimal. En el resto, usa colores mate.
Revisa tu rutina y encuentra estos pequeños fallos para corregirlos y poder sacar mucho más partido a tu maquillaje. Con estos cinco trucos -que responden a los cinco errores más comunes- podrás llevar la belleza hasta el último nivel y verte mejor que nunca.
