¿Cuántas veces has tirado un yogur o un paquete de galletas porque ha pasado la fecha? La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) advierte que buena parte del desperdicio alimentario se debe a malinterpretar las fechas de caducidad de los envases. En España, se tiran más de 1.000 millones de kilos de comida al año, y gran parte podría evitarse si supiéramos cuándo un alimento sigue siendo seguro a pesar de haber caducado.
¿Caducidad o consumo preferente? No es lo mismo
Según la OCU, es fundamental distinguir entre dos tipos de fecha que aparecen en los alimentos:
- Fecha de caducidad: aparece en productos muy perecederos como carnes, pescados o quesos frescos. Una vez pasada, no deben consumirse, ya que pueden albergar bacterias peligrosas.
- Fecha de consumo preferente: indica hasta cuándo el alimento mantiene sus propiedades óptimas. Pasado ese día, puede haber perdido sabor o textura, pero sigue siendo seguro si está bien conservado y cerrado.
Así se indica la fecha en función del producto
La normativa establece cómo debe mostrarse la fecha en función de la duración del alimento:
- Duración inferior a 3 meses: se indica día y mes.
- De 3 a 18 meses: se indica mes y año.
- Más de 18 meses: basta con el año (caso habitual en conservas).
10 alimentos que puedes comer pasada su fecha
La OCU señala que hay alimentos con fecha de consumo preferente que, si están sin abrir y no presentan signos de deterioro, se pueden consumir sin riesgo incluso días o semanas después:
- Yogures
- Pan de molde, bollos y galletas
- Patatas fritas y frutos secos
- Pastas, arroces y legumbres
- Embutidos y quesos curados
- Sopas y salsas en sobre
- Envases de tomate frito
- Refrescos
- Bebidas alcohólicas
Eso sí, pueden haber perdido algo de aroma o haberse resecado. La regla que recomienda la OCU es clara: Mira, huele, prueba. Si el aspecto es correcto, el envase está intacto y no hay olores raros, es muy probable que el alimento esté bien.
¿Esto se tira o no?
- Un yogur sin abrir que lleva 5 días caducado y ha estado en frío puede comerse sin problema.
- Un paquete de galletas blandas no es peligroso, solo ha perdido textura.
- Un pan de molde con moho debe desecharse, aunque no haya pasado la fecha.
- Un refresco pasado de fecha puede tener menos gas, pero no es peligroso.
Hay alimentos que no caducan (aunque no lo parezca)
Algunos productos no llevan ni fecha de caducidad ni de consumo preferente. Son alimentos considerados no perecederos, como:
- Bebidas alcohólicas con más de un 10% de graduación
- Sal
- Vinagre
- Azúcar
- Chicles
Esto no significa que duren eternamente. La OCU recuerda que, con el tiempo, pueden perder calidad, aunque no supongan un peligro para la salud.
Y otros que, por ley, no llevan fecha
Frutas y verduras frescas, pan del día o bollería de consumo inmediato no están obligados a llevar fecha. En estos casos, usa tus sentidos: si huelen bien, tienen buena textura y no presentan moho o podredumbre, aún pueden consumirse.
Los que nunca debes comer si han caducado
Algunos alimentos deben respetar estrictamente la fecha de caducidad, ya que pueden provocar intoxicaciones si se consumen pasados:
- Carnes y pescados frescos
- Pollo crudo
- Quesos frescos o sin curar
Además, si han estado fuera del frigorífico demasiado tiempo o en envases dañados, el riesgo existe incluso antes de la fecha.
Cómo conservar mejor los alimentos y alargar su vida útil
Reducir el desperdicio también pasa por una buena organización y conservación de los productos. La OCU aconseja lo siguiente:
- Congela lo antes posible lo que no vayas a consumir en pocos días.
- Guarda los alimentos secos (harinas, arroz, galletas...) en recipientes herméticos.
- Ordena por fechas: coloca delante lo que caduca antes.
- Evita abrir y cerrar constantemente el frigorífico, especialmente en verano.
Tres claves para no tirar comida que aún sirve
- Aprende a leer las etiquetas: consumo preferente no es lo mismo que caducidad.
- Confía en tus sentidos: si huele, sabe y se ve bien, probablemente esté bien.
- Planifica y conserva: una buena gestión de tu despensa evita muchos errores.
En definitiva, como insiste la OCU, no todos los alimentos “caducados” deben ir directos a la basura. Pero también es clave saber con cuáles no se debe correr ningún riesgo. La información está en la etiqueta... y en tu propio sentido común.