El ayuntamiento de la ciudad de Nueva York ha aprobado una ordenanza que prohíbe la venta de foie gras (un plato de origen francés basado en hígado de pato engordado, y considerado gourmet). La medida, que entrará en vigor en 2022, recibió un enorme respaldo en el pleno gubernamental de la ciudad, la mayor metrópoli de Estados Unidos (42 a favor y 6 en contra), y en adelante, las tiendas y restaurantes que lo comercialicen afrontarán sanciones de 2.000 dólares (1.800 euros).

La iniciativa partió de activistas defensores de los animales, que solicitaron la prohibición argumentando que los métodos para producir foie gras son crueles, al conllevar la alimentación forzada del ave mediante la colocación de un tubo insertado en el pico y la garganta. Son unos 1.000 restaurantes en toda la ciudad los que ofrecen foie gras, y los chefs no han recibido bien la noticia, al considerar que

Nueva York se une así a California, que prohibió la venta de foie gras en 2012, incluso a pesar de las apelaciones en los tribunales federales. No ocurrió así en Chicago, donde se prohibió el foie gras en 2006, pero la ordenanza se revocó dos años después.